sábado. 14.06.2025

Las fiestas del pueblo de La Asomada, en el municipio de Tías, finalizaron este miércoles por la noche tras más de 10 días impregnados de actividades culturales, musical y de ocio. La plaza y las calles centrales de La Asomada recibió en la tarde noche de ayer la presencia de la imagen del santo patrón del pueblo, San José Obrero, que estuvo acompañada durante la procesión por la Banda de Música de Tías y la presencia de varios miembros de la Corporación Municipal de Tías y del Cabildo de Lanzarote, entre ellos el alcalde, Pancho Hernández, y el consejero Emilio Bermúdez.

La música y bailes folclóricos también acompañaron a la imagen del santo durante el recorrido de la procesión.

Las fiestas de La Asomada han contado con más de diez días llenos de actividades culturales, ocio, naturaleza y música. “ Dado que yo de mis primeros cuatro años de vida no recuerdo casi nada, voy a centrarme en cómo era La Asomada en los años setenta, al menos cómo la veía un niño con menos de trece años…” decía el pregón leído por el doctor en Matemáticas y profesor titular de Análisis Matemático de la Universidad de La Laguna, Antonio Bonilla Ramírez, por las fiestas patronales de La Asomada, en el municipio de Tías , que tuvo lugar en el interior de la iglesia bajo la advocación de San José Obrero.

El profesor Bonilla, nacido el Máguez el 11 de febrero de 1966, relató anoche en este pregón sus vivencias personales en el pueblo de La Asomada, donde vivió los primeros años de su vida y estudió hasta cinco primeros cursos de EGB, realizando los tres últimos en Tías. La madre de este prestigioso profesor universitario era natural de La Asomada ( Tías) y nació de forma circunstancial en Máguez ( Haría) al residir allí sus abuelos maternos. Tal y como dijo en el pregón, en aquella época era normal que “nuestras madres dieran a luz en la casa de las abuelas, donde estaban mejor y recibían la mejor atención. Por eso nací en Máguez, “ aunque mis primeros años de infancia transcurrieron en La Asomada, en una época donde existían tres casas y aún las carreteras no estaban empichadas”.

El profesor Bonilla se Licenció en Matemáticas en el año 1988 y obtiene el doctorado en Matemáticas en 1994. En la actualidad ha publicado más de 40 artículos de investigación en revistas internacionales. En 1997 obtiene la plaza de profesor Titular del departamento de Análisis Matemático de la Universidad de La Laguna y director de Departamento en el periodo 2010-2012.

“La Asomada por estas fechas estaba en plena zafra de la cebolla, y el santo del pueblo era San José cuya festividad era el 1 de mayo, así que los vecinos deciden celebrar las fiestas del pueblo el último domingo de mayo”, recordó durante su pregón que fue seguido con mucho interés por los vecinos y vecinas de La Asomada que abarrotaron el interior de la iglesia de San José, en este pueblo del municipio de Tías.

El alcalde de Tías, Pancho Hernández, , junto a otros ediles del Ayuntamiento de Tías, en muchos de estos actos . El día de la lectura del pregón actuó, además, el Grupo Jóvenes, integrado por Alberto Valiente, Rayco Hernández, Guacimara Montelongo y Marco Robert, quienes deleitaron a los asistentes con numerosas baladas musicales y piezas con toque del nuevo folck canario. La actuación fue muy aplaudida.

En la tarde del pasado sábado se realizó una exhibición de coches antiguos en los exteriores de la cancha deportiva de La Asomada.

Dentro de la programación por las fiestas patronales en La Asomada, el pasado sábado, 27 de abril, actuaron dentro del VII Encuentro Folclórico Montaña de Gaida las agrupaciones folclóricas Malpaís de la Corona y Los Campesinos.

En la mañana del domingo, 28, se realizó una jornada de senderismo matinal por la zona con los guías de Senderismo Lanzarote con la presencia de un grupo próximo a las cincuenta personas. Al finalizar la ruta por este bello paisaje del municipio de Tías todos los asistentes disfrutaron una paella en las instalaciones del Centro Socio Cultural de La Asomada.

Finalizan las fiestas de La Asomada con la procesión de San José Obrero
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