Fotos: Jose Curbelo
La Agrupación Escénica Antígona representó el pasado viernes a las 21.00 horas en el Teatro Municipal de Tías la obra “Un paraguas bajo la lluvia”, bajo la organización de la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Tías y la colaboración de la Organización Nacional de Ciegos Españoles (ONCE) y el Cabildo de Lanzarote.
La comedia está basada en libro homónimo dividido en dos actos y ocho cuadros del autor Víctor Ruiz Iriarte, “Un paraguas bajo la lluvia”.
El coordinador de Cultura del Ayuntamiento de Tías, Tomás Armas, aseguraba este lunes a Crónicas que se trata de una compañía no profesional que llevó a cabo una representación interesante y que aunque el aforo concentró a más de cien personas, se pudo haber llegado incluso a más.
La obra es, según manifestó el propio autor, “un juego porque a veces el teatro es sencillamente divertido”.
Un juego con el tiempo y el amor en el que todo es nuevo y todo se repite. Desde 1885 a 1965 vivimos las historias de una familia, cuatro generaciones, cuatro mujeres enfrentadas a un destino común.
La risa, la sonrisa y la ironía surgen de un diálogo espontáneo, elegante e inteligente que hacen de esta obra una de las mejores de su autor.
No se trata de un planteamiento trascendental sino de una comedia amena y en ocasiones llena de ternura, con la visión optimista de la vida. A lo largo de cuatro historias que se suceden “Florita” luchará con astuta ingenuidad con el único objetivo de lograr el amor de ese “hombre único”.
La compañía teatral Antígona nació en 1988. Desde entonces ha participado en todas las muestras estatales de teatro de la ONCE y otros festivales internacionales como el de Ingenio, el de Almagro 97 (para personas con discapacidad) y el Festival de Actores Ciegos de Zagreb (Croacia), así como otros de carácter provincial.
Entre sus montajes destacan “Ayer, sin ir más lejos”, “Isabel, reina de corazones”, “La cinta dorada”, “Anillos para una dama”, “Angélica en el umbral del Cielo”, “Trampa para un hombre solo”, “El señor de Pigmalión”, “Tres lunas rojas” y “Sala Dos”.
La obra cuenta la historia de la saga familiar de las Floritas, que se desarrolla desde 1885 hasta 1965. La risa y la ironía surgen de un diálogo espontáneo, elegante e inteligente.
No se trata de un planteamiento trascendental sino de una comedia amena y en ocasiones llena de ternura, con una visión optimista de la vida. A lo largo de la historia, las sucesivas ‘Floritas', desde la bisabuela hasta la bisnieta, lucharán con astuta ingenuidad para lograr el amor de “ese hombre único”.
La obra, al extenderse desde la segunda mitad del siglo XX hasta la década del tardofranquismo, en los años 60, cuenta con un reparto coral encargado de escenificar las distintas épocas históricas en que transcurren las peripecias de los personajes. Así, Doña Florita en 1965 es encarnada por Carmen R. Padrón y Florita por Elo Peña.
El reparto de la obra es el siguiente: 1965 (Doña Florita-Carmen Padrón y Florita-Elo Peña), 1885(Octavio-Ramón J. Rivero, Adelaida-Sonsoles Jiménez, Florita-Elo Peña), 1905(Rosalía-Teresa Jiménez, Teodoro-Tomás Rodríguez, Florita-Sandra Pérez, Don Leandro-Cristóbal Hernández), 1936 (Guillermina-Teresa Jiménez, Adolfo-Ramón J. Rivero, Florita-Sandra Pérez) y 1965 (Doña Florita-Carmen R. Padrón, Florita- Elo Peña, Nina Valenti-Sonsoles Jiménez, Mateo- Tomás Rodríguez).
