En ese sentido, se presentará la emprendeduría como el desarrollo de una serie de acciones en las que los niños y las niñas de este nivel educativo, a través de la motivación e intuición, se organizan para llevar a cabo iniciativas creativas e innovadoras para la comunidad. En esta primera fase, y a modo de experiencia piloto, este programa se va a desarrollar en seis colegios de la isla.
Este trabajo se desarrollará a través de la experiencia de INSPIRAKIDS que mediante su Método OREOH ofrecen como trabajar la inteligencia emocional y emprendimiento en la escuela. Para ello cuentan con una plataforma virtual http://www.inspirakids.com/ desde donde los centros educativos que se han adherido al programa y que lo hagan en el futuro podrán acceder al material disponible para poder llevarlo a cabo.
Esta acción formativa se desarrollará en el primer trimestre del curso escolar 2013-2014. Desde el Servicio Insular de Juventud, organismo que depende del Área de Juventud, Deportes y Educación Vial y que dirige la consejera Migdalia Machín, se agradece la colaboración e implicación de los centros educativos de Infantil y Primaria que se han implicado en esta fase de aplicaicón del programa Filigrana. Para obtener más información sobre dicha actividad pueden llamar al teléfono 928 81 01 00 (Ext. 2195 ó 2197).
Desarrollo de la inteligencia emocional
Como ocurre con cualquier aprendizaje, asegurar un correcto desarrollo de las emociones determinará nuestra manera de afrontar la vida. Emoción, pensamiento y acción, son tres elementos muy relacionados, presentes en todo aquello que hacemos a diario. La comprensión y el control de las emociones puede resultar imprescindible para nuestra integración en la sociedad. De no ser así, podemos correr el riesgo de convertirnos en personas inadaptadas, frustradas e infelices.
La infancia es una etapa crucial en el desarrollo de la inteligencia emocional. Es el momento en que mejor se adquieren los aprendizajes, y el manejo y control de las emociones es una habilidad tan fundamental para el desarrollo de la personalidad del individuo, como determinante para posteriores momentos de crecimiento personal como la adolescencia y la juventud.