El Centro Sociocultural de Masdache pretende ser un punto de encuentro para jóvenes y mayores interesados en aprender a navegar por internet. El proyecto Internet Rural lleva ya más de un año en funcionamiento, pero ahora los responsables de este Telecentro han querido comenzar una campaña para atraer a los adultos, que siempre son los más reacios a acercarse a este tipo de actividades.
Para conseguirlo, el concejal de Nuevas Tecnologías, Juan Antonio Gutiérrez, y los encargados de la actividad se reunieron este martes por la noche con los usuarios habituales y los nuevos interesados en la sala de informática del Centro Sociocultural de la localidad para explicar las ventajas de internet a los adultos que aún no se habían atrevido a usar este servicio.
Esta primera reunión está dentro del Plan de Dinamización que lleva a cabo Toni Sanaujo, técnico del Ministerio de Industria y Nuevas Tecnologías, que recibió a las primeras interesadas en acercarse al mundo online y que está realizando esta labor por los diferentes Telecentros de España.
Se trata de una actividad organizada por el Ministerio de Industria y Nuevas Tecnologías con la colaboración del Cabildo insular y el Ayuntamiento de Tías, que es además el encargado de coordinar el taller. Después de año y medio desde su apertura, los resultados se valoran como positivos, sobre todo en lo que se refiere a la participación de los jóvenes, los más interesados en este tipo de tecnologías.
Aún así, los encargados del centro tenían la sensación de que era necesario ofrecer este servicio a un público más amplio, y por eso el Ministerio ha enviado a un técnico para que anime a los adultos a reunirse para aprender a usar una herramienta que cada vez se hace más imprescindible.
“Da un poco de miedo”
La experiencia de los monitores y encargados de esta actividad saben que el principal obstáculo para acercarse a internet es el miedo. Las generaciones adultas no se han familiarizado paulatinamente con los sistemas informáticos y los observan en muchos casos como un mundo incomprensible y complicado.
Aunque los telecentros nacieron con la vocación de facilitar el acceso a internet en aquellos lugares en la que no llegaba el servicio, han acabado por convertirse en un punto de encuentro y aprendizaje, en el que ahora quieren que participen vecinos de todas las edades.
Sanaujo es el encargado de encender este interés, y a juzgar por el primer paso dado el lunes parece que puede conseguirlo. Las asistentes se mezclaron con los chicos que habitualmente acuden al centro y tuvieron su primer contacto con la red.
Aunque en principio todas, porque en este caso eran sólo mujeres, se mostraron algo reacias, se fueron abriendo a la posibilidad según iban relatándoles las ventajas de esta herramienta.
Sobre todo les interesó lo referente a las facilidades que aporta como gestionar los trámites administrativos desde casa, la posibilidad de encontrar cualquier tipo de información de sus entretenimientos o rescatar fotografías y letras de canciones que ya creían desaparecidas.
Un punto de encuentro
Para facilitar aún más el acercamiento de los adultos al centro, los coordinadores de la actividad reservarán unos días para los grupos que quieran aprender desde cero el manejo del ordenador.
José Antonio Gutiérrez está convencido de que esta iniciativa será positiva para todos, ya no sólo por la ampliación de conocimientos que supone, sino porque crea un punto de encuentro para los vecinos, que podrán relacionarse en un ambiente relajado y entretenido.
Además, también se pretende acercar a varias generaciones por medio de un conocimiento común, internet, una herramienta que ahora es casi de uso restringido de los más jóvenes.
En principio los objetivos que motivaron esta actividad no estaban encaminados a la formación, sino más bien a posibilitar el uso de internet en los lugares a los que la línea no llegaba normalmente y que a través de la entidad pública empresarial Red.es, podían hacerlo desde lugares remotos.
En Lanzarote se colocaron Telecentros en muchos municipios en los que se localizan zonas alejadas del centro urbano y a las que no llegaba la línea. En Tías se ubicaron en Mascache y Conil, en donde llevan año y medio funcionando, y en La Asomada, en donde fueron instalados los equipos hace seis meses.
Ahora, con los sistemas en funcionamiento y los usuarios habituados al servicio, sólo quedaba aumentar la “clientela”, y parece que los más rezagados se están animando. Sin embargo, estos centros también cumplen otra importantes función, que es la de ofrecer equipos informáticos gratuitos a todos los que sí que están interesados en internet y otras aplicaciones pero que no cuentan con el material adecuado.
Por esta razón el concejal de Nuevas Tecnologías anunció que el Ayuntamiento de Tías requerirá al Ministerio otro Telecentro para hacer frente a la demanda de estos usuarios. Además informó también de la puesta en funcionamiento en seis meses de los servicios onlines del Ayuntamiento, con los que se podrán realizar muchas gestiones administrativas utilizando la red.