El Partido Popular (PP) de Lanzarote lleva unos meses de notable calma tensa. Aunque es evidente que ha habido una orden de la dirección regional del partido que comanda Manuel Domínguez de que aflojen los dos bandos claramente enfrentados, a la mínima se perciben las hostilidades y las tiranteces que siguen formando parte del día a día, un día a día que a muchos les resulta absolutamente inasumible. El encuentro celebrado este pasado fin de semana en Tenerife sirvió para que se viera claramente el cariño que muestra en público el secretario general en Canarias, Poli Suárez, hacia los teóricos díscolos, el alcalde de Arrecife, Yonathan de León, y el consejero de Obras Públicas del Cabildo, Jacobo Medina, a quien destituyó Astrid Pérez como secretario general de la formación en la Isla y sus compañeros en el Cabildo como vicepresidente primero que comenzó siendo en el Gobierno que dirige el nacionalista Oswaldo Betancort. Un cariño que contrasta con lo que luego hace la mayoría que orbita alrededor de la presidenta del Parlamento autonómico, que no se juntan con ellos ni siquiera para realizar una foto de familia. Así, hubo una foto de familia con los líderes regionales en la que estaban el alcalde y el consejero y otra en la que posaron los demás sin ellos.

Que la actual secretaria general en Lanzarote, María Tovar, también sustituta de Medina como vicepresidenta del Cabildo, dijera en Crónicas Radio, donde suelen descargar los unos y los otros los mensajes que quieren que conozca el mundo, que no tiene intención de volver a hablar en su vida con el alcalde de Arrecife, al entender que actuó de forma torticera en el asunto que terminó en los tribunales por su actuación como concejal a la hora de no justificar bien unas ayudas sociales del año 2023, no han ayudado mucho a destensar la cuerda que algunos creen que tarde o temprano se terminará rompiendo.
Este lunes, además, Jacobo Medina, que tiene razón al reivindicar que sigue siendo consejero de Obras Públicas y merece cierto respeto por parte de sus compañeros, soltó toda la bilis que llevaba dentro después de comprobar que se había dado una orden de que le eliminaran de las fotografías que envió el Gobierno del Cabildo a los medios para mostrar la buena nueva de que por fin comenzaban los trabajos de la anhelada residencia de mayores de Tahíche. De “golfada” calificó nada menos la acción, que a su modo de ver no ha supuesto sólo una falta de respeto hacia él sino hacia los trabajadores del departamento que todavía dirige.
El caso es que en principio los dos bandos claramente enfrentados tienen orden clara de dejar pasar el tiempo y no montar más escandalera de la necesaria, toda vez que, como muestran las encuestas que ellos tienen y las que manejan sus socios de Coalición Canaria (CC), Yonathan de León podría sacar un resultado histórico para el PP de celebrarse las elecciones en circunstancias más o menos normales.
Mientras, además, todos esperan a que el partido decida finalmente si se celebra o no el congreso insular que el propio Manuel Domínguez dijo también en el programa “A buena hora” de Crónicas Radio que le gustaría que se celebrara, antes del congreso regional en el que desde luego no existen ni de lejos los líos y los entresijos del que se debería desarrollar en Lanzarote. Parece evidente que el presidente del PP en Canarias no soltó el recado a la ligera, fue una clara advertencia de lo que él desea, que se ponga orden en la casa antes de que la cosa llegue a mayores. Sin embargo, no todo el mundo tiene claro que ese congreso termine resolviendo el problema de fondo, que no deja de ser un problema personal grave entre los unos y los otros, por mucho que la actual líder local guarde un para algunos sorprendente silencio.
Declaraciones de Poli Suárez
Hace unos días, también en Crónicas Radio, el secretario general en Canarias trató de dejar claro que el lío interno, que reconoció que lo ha habido, estaba totalmente controlado. “En el PP de Lanzarote hay grandes personas, con grandes proyectos y con gran capacidad de trabajo; ya sea la propia presidenta y segunda autoridad de Canarias, que a lo largo de los años ha hecho un trabajo con su equipo que ha mejorado los resultados en el Cabildo, Ayuntamiento de Arrecife y hemos mantenido el diputado en el Parlamento de Canarias por la isla de Lanzarote, como el resto. El compromiso del PP de Lanzarote tiene que ser seguir trabajando, ampliar la confianza de los conejeros para obtener mejores resultados y en ese trabajo tiene que estar todo el PP de la Isla”, comentó durante su participación en el programa “A buena hora”. “Es verdad que ha habido diferencias y no vamos a ocultarlo porque es vox populi. Esas diferencias se han puesto sobre la mesa, nos hemos dicho todo lo que nos teníamos que decir y a partir de ahí, manos a la obra por el bien del partido y de toda la Isla. Cuando mejor nos ha ido en Canarias es cuando más unidos hemos estado. La gente quiere unidad y que les escuchemos, que les solucionemos los problemas. En eso tiene que estar una organización política, no en las peleas internas”, zanjó respondiendo a las cuestiones planteadas por el periodista Alfonso Canales.
Sobre la posibilidad de que la cercanía a Yonathan de León y a lo que tanto él como Medina reivindican tuviera que ver con los datos que manejan, sobre lo bien que en teoría iría en estos momentos en un posible intento de repetir como alcalde de la capital lanzaroteña, no fue tan claro. “Yo no manejo encuestas. Siempre he dicho que la mejor encuesta es la del día de las elecciones. Sin embargo, todos hacemos análisis. Yo le he dicho a Manolo Domínguez que nosotros tenemos que estar preocupados en tener la maquinaria engrasada para lo que pueda pasar si hubiese un adelanto electoral a nivel nacional o de cara a las próximas elecciones municipales e insulares, donde tengamos comités, candidaturas en los 88 municipios de Canarias, en los siete Cabildos y al Parlamento de Canarias. Esto hay que hacerlo con la gestión en las diferentes consejerías y como trabajo de partido y es lo que estamos haciendo con los presidentes insulares”, resumió.
Para él, no cabe duda de que el enemigo nunca puede estar dentro de casa, está claramente enfrente, especialmente con un Partido Socialista (PSOE) en el Archipiélago que parece desesperado por tratar de romper el acuerdo que mantienen con Coalición Canaria (CC). “La bancada socialista ha ofrecido en el Gobierno de Canarias en varias intervenciones que el presidente del Gobierno rompa con el PP en Canarias y el presidente le ha dicho que no porque hay un trabajo de equipo, hay una lealtad, un compromiso con esta tierra, con los canarios y eso es lo que le está molestando al PSOE. Eso no es sólo una instrucción del secretario general del PSOE en Canarias, es un hecho contrastable que se está produciendo día sí y día también”, explicó.