La consejera de Deportes del Cabildo de Lanzarote, Patricia Pérez, se ha mostrado este lunes muy molesta con los alcaldes de su partido –Coalición Canaria (CC)- de Tinajo y Haría, Jesús Machín y Marci Acuña, que se han quejado públicamente del recorrido del Ironman de este año y de la teórica falta de consenso que ha habido a la hora de cerrar pueblos enteros que se han visto notablemente perjudicados por el desarrollo de la prueba. Especialmente dura ha sido en declaraciones al programa “A buena hora” de Crónicas Radio-COPE Lanzarote con el edil norteño, sobre todo porque no entendió que sacara una nota de prensa hablando del aislamiento de su municipio “un día antes de que se celebrase la prueba” cuando tanto el suyo como el resto de los ayuntamientos habían participado en infinidad de reuniones para abordar el tema de los recorridos y las imposiciones que ha hecho la Guardia Civil para garantizar la seguridad de los participantes.
“Ha sido un fin de semana de mucho jaleo, de muchas carreras. Pese a todo, hemos estado muy tranquilos porque las cosas estaban más que atadas, pactadas y organizadas. Contamos con la experiencia del año pasado, que fue una locura, porque los requisitos de Tráfico no han sido los mismos, y ha habido inconvenientes que hay que analizar”, explicó para abrir boca. “Los atletas saben que tenemos el Ironman más duro del mundo con el actual recorrido, y por eso se hace como se hace”, señaló.
Fue en ese momento, cuando habló del recorrido, el momento en el que advirtió que “el recorrido del Ironman está hablado y pactado con todos los municipios”. “Hemos pasado por todos los municipios para enseñar el recorrido, nos hemos reunido con las policías locales sin cerrar el recorrido definitivo para que ellos aportaran dudas o sugerencias. Nadie puede decir que no hemos conjugado todos los factores para que los tramos fueran del máximo consenso posible. No es fácil hacer un recorrido, y no queremos hacer un recorrido cerrado y sin encanto. Tengo que agradecer a la población por lo que ha sucedido el sábado, porque la colaboración de toda la gente ha sido increíble. Donde pensábamos que íbamos a tener problemas, finalmente no hemos tenido ninguno”, subrayó visiblemente molesta.
Centrándose ya en su crítica a la nota de prensa que envió el Ayuntamiento de Haría el viernes, indicó que “precisamente en el norte sólo tuvimos una incidencia que se resolvió sobre la marcha, y ninguna queja”. “Cada uno puede decir públicamente lo que le venga en gana, pero los hechos son que el año pasado la prueba del Ironman funcionó bien en el norte de la Isla, y este año la prueba del Ironman ha funcionado muy bien en el norte de la Isla”, destacó. “El sábado pasado fuimos todos a Ye y a Guinate, para hablar con los vecinos de la zona porque sí son los más perjudicados. La gente de Ye, que son los únicos que verdaderamente se quedan aislados, nos dijeron que no se nos ocurriera cambiar nada por ellos, que lo entendían. Fíjense qué importancia le dan los vecinos al Ironman", insistió cada vez más molesta.
"Las declaraciones de los dos alcaldes están fuera de lugar. Un día antes de la prueba no se puede sacar una nota de prensa como la de Haría. Sé el trabajo que hay detrás, lo que se ha hecho, hay gente que está a favor, en contra, pero hay que saber explicar lo que ha sucedido. Todos los pueblos afectados conocían exactamente lo que pasaba, habíamos previsto hasta el traslado de los vecinos en vehículos. Todas las carreteras estaban señalizadas una semana antes, hemos ido vivienda por vivienda entregando documentación. Llevamos un año preparando esta prueba, y no se puede venir a última hora a intentar tumbar el trabajo de muchas personas", afirmó. "El recorrido de este año no tiene nada que ver con el del año anterior, estamos siempre evolucionando. Lo que cansa a la población no es que se cierre un día una carretera por el Ironman, lo que le cansa a la gente es la cantidad de pruebas que hay organizadas por los ayuntamientos y que cierran muchas veces las carreteras", señaló, pidiendo en su caso que para eso sí se sienten de una vez a hablar y hagan un calendario estricto para toda la Isla.