Por David Rodríguez
Confieso que me ha llamado mucho la atención no haber visto a ningún concejal socialista en El Reducto el pasado domingo, el día de la Final de la Copa del Mundo. Sobre todo al acabar, que con el triunfo histórico de la Selección Española, aquello fue una Fiesta con mayúsculas y no cabía un alfiler en los alrededores. Toda la isla se echó a la calle. Menos ellos, claro. Quisieron estar tan ausentes, que si algo se notó precisamente fue que no estaban.
Aún no entiendo qué es lo que le pone de los nervios al PSOE al ver al alcalde de Arrecife, Cándido Reguera, como si fuera uno más, entre la multitud. Yo nunca había visto tanta gente en la playa del Reducto, cantando y saltando al ritmo del waka waka, y el “yo soy español, español, español”. Fue una manifestación completamente espontánea y popular, muy divertido: una explosión de alegría desbordante, como pocas en Lanzarote.
A veces el PSOE tiene esas cosas incomprensibles. A mi, como a mucha gente, nos gusta ver a un alcalde llano y del pueblo, mezclado entre la gente, disfrutando como nadie (y vaya si disfrutó) de la Final de la Copa del Mundo de Fútbol. No entiendo esos alcaldes estirados y prepotentes. No lo he entendido nunca. No entiendo que nadie se crea nada por el hecho de ser alcalde. No sé lo que entienden los socialistas por ser alcalde.
Cándido Reguera demuestra día a día que nadie está por encima de nadie, que por mucho alcalde que se sea, uno se puede poner el gorro de la Selección Española, y los colores de la bandera, y botar y botar (con b, señores, no con v) junto con el pueblo. A los socialistas parece que les dio vergüenza mezclarse entre las 10.000 personas que estábamos festejando el triunfo de España. Pero claro, todo tiene su explicación. El diputado socialista Miguel González (que nadie sabe quien es, pero es diputado) ya lo había dejado claro días antes en un artículo diciendo que los populares nos habíamos caracterizado de “apasionados hinchas de la selección con Cándido el del bombo al frente de la expedición”. Y además se preguntaba que ¿por qué “los cabezas visibles del PP lanzaroteño se expusieron a la mofa pública?
¿Qué los conminó a convertirse en frikis por un día?”
Pues Sr Diputado, tendría Ud. que preguntar a las 10.000 personas que acudieron al Reducto por qué se caracterizaron, como a Ud. le gusta decir, de “apasionados hinchas de la selección”. Debería preguntar también a las 10.000 personas allí presentes ¿qué los conminó a convertirse en frikis por un día? Al parecer para el PSOE, eso es exponerse a la mofa pública.
Y lo que muchos nos preguntamos es: ¿Por qué los socialistas no quisieron celebrar con todo Lanzarote que España es la Campeona Mundial de Fútbol? No sé si fue porque les da grima los colores de la bandera (aunque el rojo, digo yo, no les debería dar tanto pudor), o quizá piensen que su superioridad ideológica no les deja mezclarse entre el pueblo llano. No tengo ni idea. Pero lo siento por ellos: se perdieron una de las fiestas más grandes que yo he visto en las que se ha podido ver a todo el pueblo de Lanzarote unido. Y lo digo de verdad: a mi me hubiera gustado estar todos juntos celebrando que España es Campeona del Mundo.
