sábado. 20.04.2024

Kielo Ya Mazaya, la puerta del saber

“Desde que sigo el curso he aprendido a escribir y leer correctamente e incluso contar el dinero se ha convertido en algo fácil para mí, para manejar mejor mi propia economía. Gracias por esta formación”.

Me encanta leer. Leo la prensa a diario y libros de emprendedores, fundadores/as de empresas… historias que amplíen mi horizonte mental, que espolean mi imaginación, cuando puedo. No me imagino no sabiendo leer. Creo que la aventura de aprender a leer y a escribir es una de las más fascinantes en la vida del ser humano. La capacidad de recrear a nuestra manera lo que otra persona ha escrito tratando de describir una escena o transmitir un sentimiento, una sensación… y viceversa, el arte de, poniendo en negro sobre blanco unos caracteres poder lograr que a miles de kilómetros personas que nunca llegaremos a conocer puedan recrear, sentir, entender y vivir a través de nuestras experiencias y vivencias, nos abre a mundos nuevos. 

Y en eso consiste Kielo Ya Mazaya, “la puerta del saber”, un programa de alfabetización para enseñar a leer y escribir en francés, usando la lengua de la región, el Kikongo, como lengua vehicular de aprendizaje y nociones básicas de cálculo, aplicando el sistema pedagógico de Radio ECCA. Me parece un título acertadísimo para el curso de alfabetización dirigido a personas adultas en la República Democrática del Congo a través de la radio organizado por Fe y Alegría Congo y Radio ECCA, y financiado por Entreculturas y Alboan (ONG de la Compañía de Jesús) y el Cabildo de Gran Canaria. Aprender a leer es cruzar el umbral de una puerta que nos lleva a múltiples posibilidades de conocimiento. Escribo porque he sido testigo de este proceso de “descubrimiento” en mi reciente visita al proyecto para hacer entrega de los diplomas de la primera promoción en Kikwit (250 000 habitantes a 800 km de Kinshasa). Si tuviera que quedarme con una sola instantánea de mi visita sería la de las caras radiantes de quienes han descubierto un nuevo horizonte, que ha favorecido su autonomía e independencia. Kielo Ya Mazaya les ha permitido entender desde qué están pagando y por qué, hasta qué dice una propaganda comercial o el prospecto de un medicamento, inscribir a sus hijos/as en el colegio, no tener que pedir ayuda para saber cuál es su turno en la cola del médico...

Fe y Alegría Congo tiene una tarea ingente por delante. Según los datos de UNICEF, el 43 % de la población adulta en Congo no está alfabetizada y el 45 % del total de niños y niñas abandona la escuela sin finalizar la educación primaria. Ante esta realidad apremiante hubo un grupo de personas de Fe y Alegría Congo que tuvieron la visión y audacia de pensar que el sistema de educación por radio que nació con Radio ECCA en Canarias y se extendió con Fe y Alegría en Latinoamérica podría ser útil en África. Así, con el apoyo de la Compañía de Jesús a través de Alboan y Entreculturas, se puso en marcha esta colaboración. Mi reconocimiento y enhorabuena a este grupo de personas visionarias que empezó a soñar con este proyecto en 2018. Tras las visitas al terreno y la investigación, llegó el diseño, la búsqueda de recursos y finalmente la implementación.

El material de Kielo Ya Mazaya se elaboró en la sede central de ECCA en Canarias con dos profesores congoleños de FyA Congo, Pascal Galande y Micheline Kwango, y nuestro equipo pedagógico. El equipo de profesores, dinamizadores y acompañantes ha sido seleccionado en función de los distintos clubes de escucha que existían en Fe y Alegría anteriormente y se desarrolla en 8 comunidades de Kikwit. Semanalmente se tiene una reunión del equipo educativo de FyA-ECCA para repasar la asistencia, resolver dudas, ajustar y mejorar en un sistema de aprendizaje continuo que es esencial en todo proyecto que empieza.

Nos queda un largo camino por recorrer, las largas carreteras cortadas al manto verde del Congo me recuerdan The Road ahead (Bill Gates, 1995), que anticipaba un futuro de “oficinas sin papel”. En 2018 un equipo de soñadores pensó que era posible alfabetizar en Congo a través de la radio. En 2021 se ha hecho realidad. Ciertamente, la comunidad educativa FyA-ECCA tiene una “larga carretera por delante”. Larga, prometedora e ilusionante. ¡Hay tantas cosas que podemos hacer! ¡Hay tanta oportunidad y tanta riqueza en el Congo! ¡La gente tiene tantas ganas de aprender que van más personas de las apuntadas a los grupos por si alguien se da de baja y así poder participar! El director de Fe y Alegría Congo, Alfred Kiteso y el responsable de ECCA para el proyecto, Jesús Jiménez, me contaban que en las “moto-taxis”, los conductores van escuchando las clases de FyA-ECCA, que se emiten a través de “Radio Tomisa” (la emisora local). De tal modo que nuestro alumnado real va mucho más allá de las personas matriculadas. Imaginen el potencial de este sistema para sensibilizar sobre deforestación, uso responsable del agua, higiene, enfermedades, prevención de embarazos juveniles… y un amplio etc.

En mi último día en el Congo visité la radio local de Kisantu (80 000 habitantes a 100 km de Kinshasa) donde ya estamos grabando las clases en Kintandu, el dialecto local, y donde esperamos iniciar el programa este mismo año. En la visita, el director comentaba: “jamás habría imaginado que podríamos tener un programa conjunto con una institución que está a miles de kilómetros en Europa”. Y es que, bien pensado, Kielo Ya Mazaya es una audacia: combina la sencillez de un sistema de enseñanza por radio ideado en Canarias hace casi 60 años con todo el desarrollo tecnológico de la ECCA del siglo XXI que nos permite formar en Canarias, grabar en emisoras locales, enviar material digitalmente para imprimir localmente y, mediante nuestro sistema de aprendizaje-evaluación continua, estar ya preparando mejoras para la próxima edición.

Termino estas líneas citando el final del informe interno de ECCA de esta primera edición de Kielo Ya Mazaya:

“Sin duda, hay muchas cosas por mejorar, pero, con ilusión y esmero, cada día avanzamos”.

José María Segura es director general de Radio ECCA

Kielo Ya Mazaya, la puerta del saber
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