A pesar del día y la noche lluviosos y tristes, aunque no se daban las circunstancias para que algo así ocurriera, este domingo amanece con el aviso de los bomberos del Consorcio de Seguridad y Emergencias de que ha vuelto una pequeña pero significativa quema incontrolada de contenedores en Lanzarote. Así lo ha explicado el Consorcio de Seguridad y Emergencias del Cabildo, que atestigua el trabajo que han tenido que realizar los expertos en evitar que estas cosas se descontrolen, no que ocurran. Atrás queda por tanto la sensación de que con la detención del pirómano confeso de la bicicleta que quemó más de contenedores, cientos de miles de euros de los contribuyentes, se terminaba el asunto.
El primer aviso lo recibieron los bomberos sobre las 23.42 horas del sábado, momento en el que tuvieron que acudir a la calle Marqués de Santillana de Arrecife. Allí se encontraron a dos agentes de la Policía Local y a un vecino que trataban de sofocar el fuego con un extintor. Los bomberos terminaron de controlarlo.
Ya en la madrugada del domingo, a las 2.28 horas, recibieron el aviso de que se había producido el incendio de otro contenedor en la calle Democracia de Arrecife. Al llegar vieron un gran incendio de un contenedor que además afectaba al cableado eléctrico que estaba justo encima. Los agentes de la Policía Local habían retirado dos contenedores que estaban cercanos al que ardía para evitar que terminaran tan mal como el otro. En seguida se hicieron con el control de la situación y limpiaron la carretera y la acera para que pudiera circular la gente por allí y los vehículos a esta primera hora de la mañana del domingo.
A las 4.53 horas, imposible que fuera de forma casual, el Centro Coordinador de Emergencias del Gobierno de Canarias volvió a avisar a los bomberos de que se estaba quemando otro contenedor, en este caso en la calle Grieta también de la capital. Cuando llegaron se dieron cuenta de que los agentes de la Policía Local, que han estado toda la noche del tingo al tango con este asunto, habían volcado el contenedor para evitar que se propagara el fuego. Los bomberos lo terminaron de extinguir y dieron por finalizado el servicio conscientes de que podía haber sido peor la cosa y conscientes de que vuelve a haber alguien que está haciendo de las suyas. La Policía Local de Arrecife y la Policía Nacional, como es lógico, han vuelto a abrir una investigación por lo sucedido.
