Un varón de 82 años de edad y nacionalidad alemana falleció el pasado domingo, 7 de marzo, en pleno vuelo de un avión, un B-73 H perteneciente a la compañía Happal-Loid, procedente de Stutgart, Alemania, y con destino a Gran Canaria, y que tuvo que desviarse hasta la isla de Lanzarote ante el repentino fallecimiento del octogenario.
Según informan fuentes oficiales de AENA (Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea), el avión, que tenía previsto aterrizar en Gran Canaria, tuvo que desviarse hasta la Isla de los Volcanes a las 15:50 horas de la tarde del domingo, cuando se produjo la indisposición del turista a bordo de la aeronave. La mismas fuentes apuntan a una parada cardiorrespiratoria como causa de la muerte.
A esa hora el piloto del avión decidió desviar el rumbo y pidió permiso para aterrizar en Lanzarote. En cuanto la aeronave de la compañía aérea Happal-Loid tomó suelo en Guacimeta, el afectado fue atendido a bordo por el personal del Servicio de Urgencias Canario (SUC), que trasladó hasta el lugar a su personal sanitario en una ambulancia medicalizada.
A pesar de las maniobras de reanmación cardiorrespiratoria que el personal médico le aplicó al turista, nada se pudo hacer porsalvar la vida del hombre de 82 años, y sobre las 16:05 horas se confirmaba el fallecimiento. Posteriormente intervino la Policía Judial, que se encargó de extraer el cuerpo sin vida de la víctima, mientras que en la zona se personó también la titular del Juzgado de Guardia de Arrecife en esos momentos, el Número 8, junto a un forense.
La comisión judicial procedió al levantamiento del cadáver y a su traslado hasta dependencias forenses para determinar las causas exactas del fallecimiento.
Estaba previsto que el avión se dirigiera directamente hasta la capital grancanaria pero, tras aterrizar en Guacimeta ante el fortuito incidente, la aeronave partía, ya con nueva tripulación a bordo y con sus 155 pasajeros, hacia Gran Canaria en torno a las 23:00 horas del domingo.