AGENCIAS
La Policía ha hallado un bate de béisbol ensangrentado y signos de pelea en varias habitaciones de la casa de Lisa M., de 28 años, la británica que murió este miércoles en el sur de Tenerife presuntamente a manos de su novio, que ha sido detenido por ello y con el que no vivía, como se dijo en un principio.
La víctima telefoneó a las tres de la madrugada de este miércoles a su novio, también de nacionalidad británica y residente habitual en Tenerife, y le pidió que fuera a verla porque "se encontraba mal", según ha declarado éste a la Policía, informaron fuentes de la Delegación del Gobierno en Canarias.
Hasta la urbanización Palo Blanco de Playa de las Américas, en el municipio tinerfeño de Adeje, al sur de Tenerife, se dirigió entonces el novio de Lisa, con quien, por motivos que se desconocen, sostuvo, una vez en su domicilio, una fuerte pelea que llevó a uno de sus vecinos a llamar al 091 para alertar de lo que estaba ocurriendo en el interior de la vivienda.
Cuando la Policía llegó al domicilio de Lisa M. la encontró en parada cardiorrespiratoria, con muchos hematomas y en medio de un charco de sangre.
Los servicios médicos desplazados al lugar trataron de reanimarla y la trasladaron, en estado crítico, hasta el hospital Hospiten Sur, donde falleció a las 13.00 horas.
Tanto los médicos que trataron de salvar la vida de la joven, como el forense que examinó luego su cadáver han destacado que en su cuerpo hay indicios de maltrato, algo que determinará con mayor precisión la autopsia que se le practique, este miércoles o este jueves, al cadáver.
La detención del novio de Lisa M. se ha practicado por las numerosas "incoherencias" en las que incurrió cuando fue interrogado por la Policía, por los objetos encontrados en la casa de la víctima y por las señales de pelea que había en varias de las habitaciones, así como por los indicios de malos tratos detectados en el cuerpo de la fallecida.
