Según los últimos datos del Consejo Regulador, las bodegas acogidas a la Denominación de Origen de Lanzarote retiraron durante el año 2009 un total de 1.283.348 contraetiquetas, lo que supone un descenso de casi el 29% respecto al 2008, cuando el órgano vitivinícola dispensó 1.798.135 distintivos de calidad.
El descenso en la petición de contraetiquetas está motivado por los efectos de la crisis que repercute en distintos sectores de la producción y la comercialización.
Los datos ponen de manifiesto la disminución del volumen de ventas que se ha generalizado en las bodegas y la caída del consumo de vino en la restauración.
Las expectativas para el año 2010 se presentan muy difíciles dada la grave crisis que atraviesa el sector. Por eso, el Consejo Regulador de Denominación de Origen de Lanzarote se ha propuesto desarrollar promociones de forma permanente a través del desarrollo del olvidado Plan Estratégico del Vino de Lanzarote.
En el último pleno, celebrado el pasado día 15 de enero, se acordó remitir escrito al Cabildo de Lanzarote solicitando la puesta en marcha del Plan, que fue elaborado en el año 2007 por el Ente Profesional Empresarial Local (EPEL) de los Centros Turísticos y que ha permanecido paralizado desde entonces.
Cabe recordar, que en uno de los artículos del protocolo de ayuda a la campaña de vendimia 2009, firmado entre el Cabildo y el Consejo Regulador en el mes de agosto para dar solución al excedente de uva, indica que finalizada la vendimia se daría un impulso al Plan Estratégico del Vino de Lanzarote, cosa que a día de hoy todavía no se ha producido.
Desde el Consejo Regulador se concibe el plan como una herramienta de trabajo conjunto entre el sector vitivinícola y la administración, con líneas bien definidas y coordinadas que aborden y definan las actuaciones a realizar en cada uno de los agentes que conforman el sistema vitivinícola en Lanzarote.