La FCM recibe un homenaje con un espectáculo que ensalza el arte a través de la unión entre música y literatura

Fotos: Anabel Navarro

La Fundación César Manrique (FCM) recibió este domingo por la noche un afectuoso homenaje con el recital Domenico Scarlatti y José Saramago, un espectáculo que aunó música clásica y literatura.

Concretamente, la obra entrelazó fragmentos del Memorial del Convento del Nobel portugués con la música barroca del compositor italiano barroco afincado en España, que fue reconocido por sus sonatas.

También se pretendía rendir tributo con el recital a los 85 años que ha cumplido recientemente Saramago, al aniversario de la publicación esta obra y al de la muerte de Domenico Scarlatti.

Minutos antes de que comenzase el espectáculo, que llenó prácticamente el teatro del cine Atlántida, la presidenta del Cabildo de Lanzarote, Manuela Armas, y la mujer de Saramago, Pilar del Río, realizaron una breve introducción para justificar la celebración de este recital.

Armas agradeció la labor de la FCM y recordó la importancia que tiene los Centros de Arte, Cultura y Turismo (CAT) para Lanzarote, ya que “son el plato fuerte que nos diferencia de otros destinos”. La presidenta tampoco quiso pasar por alto la magnífica exposición que la FCM, y concretamente Fernando Aguilera, ha realizado de la vida de José Saramago. Y es que la La Consistencia de los sueños, como recalcó Armas, recorrerá algunas de las ciudades más importantes del mundo para difundir la obra inédita del Nobel portugués. “Es un motivo de orgullo que el nombre de José Saramago viaje junto con el nombre de Lanzarote”, destacó la presidenta.

Por su parte, Pilar del Río, visiblemente emocionado, explicó que su marido no pudo acudir al homenaje por motivos de salud, aunque anunció que ha mejorado notablemente. Del Río agradeció a la Fundación la exposición dedicada a Saramago y dio algunas pinceladas para entender el porqué del título del recital Domenico Scarlatti y José Saramago. “Un grupo de artistas descubrieron que hay música dentro (del Memorial del Convento), que existe una relación entre la música y la literatura”.

De este modo, se dio paso al recital, cuya narración recayó en la voz de Jorge Vaz de Carvalho y que fue interpretado por un grupo de músicos finlandeses: la soprano, Sirkka Lampimäki, que encandiló al público con su espectacular voz; la música del clavo, de Elina Mustonen y la danza, de Lili Dahlberg. Todo ello bajo la dirección artística de Lisbeth Landefort y para darle vida a un texto de Saramago, que narra una historia de pasiones, alegoría de la imposibilidad de describir una realidad que no sirve.