Este lunes Lanzarote ha amanecido con una triste noticia, la muerte del conocido empresario Antonio Becerra. Abandonó este mundo con 87 años de edad, y después de haber dejado huella no sólo en el mundo empresarial sino en el mundo de la sociedad lanzaroteña, donde ha sido sin duda una de las personas más conocidas en las últimas décadas. Hay pocas personas en Lanzarote que no conocieran a Don Antonio, tanto como persona como empresario.
Antonio Becerra era padre de siete hijos, alguno de ellos muy populares por dedicarse al mundo de la política, como es el caso del presidente del Partido Nacionalista de Lanzarote (PNL), Juan Carlos Becerra, que ha llegado a ser presidente del Cabildo de Lanzarote y consejero del Gobierno de Canarias. Pero sería injusto para su memoria recordarle por algo así, porque fue, como ya se le reconoció en vida, un emprendedor de los que ya no existen, alguien capaz de conseguir a base de esfuerzo y tesón convertir una pequeña tienda en un pequeño imperio, el que condujo a Almacenes “El Barato”, a través de la idea siempre presente en su mente de que Arrecife tenía muchas posibilidades, de negocio a gran negocio.
Una de las claves de su éxito, al margen de la simpatía y de la buena atención al público, fue la constancia y la presencia permanente en el negocio. Raro era el día que no se le veía despachando en alguna de sus tiendas, soltando un “¿alguna cosa más?” que tan popular se hizo entre su clientela habitual. Era, por tanto, y a pesar de que sabía que el negocio familiar estaba en buenas manos, una persona a la que le gustaba trabajar, y le gustaba lo que hacía.
Antonio Becerra fue además impulsor de ideas como la de Arrecife Zona Centro, convencido y firme defensor de la unidad frente a la división empresarial que ha sido firma y sello de Lanzarote a lo largo y ancho de su historia. Sabía, como demostró, que la Calle Real tenía muchas posibilidades de negocio, y fue de los que logró que esa idea se transformara en una realidad. Gran parte de lo que es hoy el centro comercial de la capital lanzaroteña se le debe a él.
El velatorio de Antonio Becerra se ha instalado en el Hospital Insular, según han explicado a Crónicas fuentes de la familia, y está previsto su traslado a la iglesia de San Ginés para el martes, lugar en el que se celebrará una misa funeral a partir de las doce del mediodía.