Con gritos de júbilo del público que este lunes llenó el salón de plenos del ayuntamiento capitalino, un abrazo entre los dos concejales de Alternativa Ciudadana selló la muerte del más polémico planeamiento urbano de los últimos años, el Plan General de Arrecife, aprobado inicialmente por el anterior grupo de gobierno el 19 de marzo de 2007. Con quince votos a favor, correspondientes a PSOE, PIL y Alternativa Ciudadana; siete votos en contra por parte de Coalición Canaria y Partido Popular, y los ya habituales votos de abstención del PNL, el Plan General de Arrecife ha sido retirado. Se cumplió así la promesa electoral estrella del pacto de gobierno que dirige el Consistorio capitalino.
Todo lo que tenían que decir cada uno de los grupos políticos sobre este documento ya lo hicieron en innumerables ocasiones tanto en casi todas las sesiones plenarias de los últimos doce meses, como en todos los medios de comunicación insulares. Así que el debate a penas duró una hora. Un debate interrumpido al menos una docena de veces por el público, al que incluso amenazó con desalojo el alcalde Enrique Pérez Parrilla, sobre todo ante las reiteradas faltas de respeto al portavoz de los populares, Cándido Reguera.
El público permaneció en pie casi toda la hora en la que se expusieron los argumentos políticos a favor y en contra del Plan, y lo hicieron sujetando carteles en los que se podía leer “Todo gracias al movimiento ciudadano”. Al final, y con el Plan General retirado, a las puertas del Ayuntamiento se descorcharon botellas de champán para celebrar un hecho que Alternativa Ciudadana se atribuye como mérito propio, aunque no en exclusividad, tras cinco años de lucha para “cargarse este despropósito”, en palabras del portavoz de AC, Andrés Barreto. Ayudaron también las más de cuatro mil alegaciones en contra del planeamiento presentadas por los ciudadanos, muchos residentes en la zona de Morro Angelito.
Más de 850.000 euros malgastados
“No todo son buenas noticias”. El primer jarro de agua fría lo echó el portavoz del Partido Nacionalista de Lanzarote, Pedro de Armas. Recordó que la contratación del equipo redactor de Senante fue aprobada en su día tanto por el PIL como por el PSOE por valor de 95 millones de las antiguas pesetas. Sin embargo, el coste final del ordenamiento que este lunes pasó a mejor vida supera los 850.000 euros, más de 150 millones de las antiguas pesetas. “Es posible que el Gobierno de Canarias nos reclame ahora las subvenciones de Política Territorial” que en su día obtuvo la Corporación para poner en marcha la redacción del PGOU, indicó Pedro de Armas.
Para todos los partidos de la oposición, a excepción de Alternativa, la retirada del Plan no es una buena noticia. “Estaremos siete años sin Plan”, aseguró De Armas. Seis años sin nuevo ordenamiento son los que vaticina el PP, formación que tiene la visión más pesimista a este respecto. “Es una decisión tremendamente irresponsable e injustificada”, dijo Cándido Reguera. El portavoz del PP quiso reiterar, al igual que en otras tantas ocasiones, que la determinación política de hacer un nuevo ordenamiento urbano supondrá perder la oportunidad de construir nuevos colegios, centros sanitarios, viviendas de protección oficial, aparcamientos subterráneos, entre otras muchas dotaciones públicas y privadas “que podrían relanzar el desarrollo económico y el empleo” en Arrecife.
La óptica de “la maldad política”
“Desde la maldad política me alegraría de que acabaran con el Plan General, porque es ahora cuando van a empezar los verdaderos problemas para Arrecife”. Son las palabras del portavoz de Coalición Canaria, Luís Morales, con esta afirmación auguró un negro futuro para la ciudad, y sobre todo para el grupo de gobierno PSOE - PIL. Partido Popular y Coalición Canaria aseguraron que el Ayuntamiento podría enfrentarse a compensaciones de hasta 200 millones de euros a partir de 2009. Sería por incumplimiento de acuerdos con empresas privadas para aprovechamiento de más de 300.000 metros cuadrados de suelo de sistemas generales, convenios que comienzan a caducar a partir del próximo año.