El departamento de Patrimonio Histórico del Cabildo de Lanzarote ha paralizado recientemente unas obras de canalización del Consorcio insular de Aguas por afectar a yacimientos arqueológicos de la zona de Zonzamas. Así se puso de manifiesto este pasado martes durante la celebración de una comisión informativa de Patrimonio Histórico a la que acudían entre otros consejeros, los representantes de Somos Lanzarote. Su portavoz en el Cabildo, Tomás López, ha explicado a Crónicas que "uno de los temas polémicos en dicha comisión llamaba la atención pues se trata de unas obras de canalización de Canal Gestión, que está llevando a cabo el Consorcio del Agua, aunque están ejecutándose por Canal Gestión, y que tuvieron que ser paralizadas por el propio servicio de Patrimonio del Cabildo porque estaban afectando al área afectada de yacimientos arqueológicos de Zonzamas".
En la propia de la comisión de Patrimonio, según López, técnicos expertos como el del Ayuntamiento de Tías pusieron sobre la mesa el hecho de que "no solo se podría haber degradado o se empezó a degradar este espacio arqueológico, sino que además las obras son poco respetuosas con el patrimonio paisajístico y el patrimonio natural".
En este sentido, desde Somos Lanzarote creen que "un Consorcio como el del Agua, en el que están presentes el Cabildo y los siete ayuntamientos, tiene que ser estrictamente escrupuloso con el cuidado de estos valores". "No puede ser que el propio Cabildo tenga que parar estas obras al propio Consorcio porque está entrando en zona arqueológica", ha esgrimido Tomás López, que anuncia que desde Somos "estaremos pendientes pendientes de las zanjas que se están abriendo y de las veredas que se están abriendo como pistas para coches". A su juicio, "seguro que toda la ciudadanía de Lanzarote respalda que esto se mire con lupa y que el propio proyecto debe contener este tipo de previsiones para afectar lo menos posible al paisaje".
Cabe recordar que en el municipio de Teguise se encuentra el valle de Zonzamas, rico en muestras del pasado prehispánico de Lanzarote.
Las condiciones naturales de la llanura central lanzaroteña, a la que van a parar las aguas desde las montañas que la circundan, hicieron de ella un lugar propicio para la agricultura y, en especial, para el cultivo de la cebada, base de la dieta de los isleños y de todas las comunidades humanas del África septentrional.
Todo ello explica que se erigiera en aquella localización uno de los núcleos poblacionales más importantes de los que hallaron los normandos a su llegada a la Isla, y que, al parecer, seguiría habitado tras la Conquista, hasta bien avanzado el siglo XVIII. Dicha afirmación viene avalada por los restos de cerámica encontrados en la zona y algunas construcciones de manufactura europea. Este paraje recibe su nombre de Zonzamas (Zamzâm, ‘rostro alegre’) , antiguo gobernante de la Isla.