El nuevo senador por Lanzarote, José Ramón Galindo, ha asegurado este viernes en Crónicas Radio-Cope Lanzarote que él y toda su familia lo han pasado muy mal desde las últimas elecciones generales del 20 de diciembre, momento en el que a través de las redes sociales se dio a conocer que el nuevo representante de la Isla en la Cámara Alta fue detenido en 2008 por parte de la Policía Local de Tías y acusado de un presunto delito de tráfico de drogas. Luego, posteriormente, la noticia saltó a los medios locales y de ahí a los nacionales, con lo que se organizó un revuelo que llevó a diferentes agentes sociales y políticos a reclamar su dimisión. Sin embargo, en su intervención en el programa 'A buena hora', Galindo ha dejado claro que la dirección de su partido, Podemos, le ha respaldado en todo momento y que por ello, tras ser el candidato al Senado más votado de las distintas opciones políticas, nunca se ha planteado renunciar a su nuevo cargo.
"La verdad es que lo hemos pasado mal; la familia sobre todo, pero bueno, eso pasó hace muchos años: simplemente hubo una detención", ha explicado el integrante de Podemos, "pero nunca he sido un traficante ni un delincuente". "Ahora me gustaría que se me juzgara por lo que haga a partir del día 20 de diciembre, que es cuando he sido elegido, y hasta que dure el mandato", ha reivindicado Galindo.
Cuestionado sobre posibles presiones para que abandonara el puesto, el senador ha contestado que no pensó "nunca en renunciar". "Lo que hice fue hablar con todos mis compañeros, ver qué pensaban ellos y, como todos me apoyaron y me dijeron que siguiera adelante, decidí seguir", ha añadido. "Esto es un partido asambleario", ha recordado, "y si me hubieran dicho que me retirara, yo me habría ido con mucho gusto".
También ha señalado que desde la dirección nacional de Podemos quisieron averiguar qué ocurrió con aquellos hechos protagonizados por Galindo en 2008. "Me llamaron para preguntarme por el tema; yo les expliqué todo, me apoyaron y por eso sigo", ha manifestado el senador, que ha insistido en que "si hubiera tenido problemas, me habría ido pues no tengo por qué quedarme en el cargo sin el apoyo de mi partido". Según ha aclarado, "la causa quedó archivada y no hubo juicio ni nada; ahí quedó".
El integrante de Podemos por Lanzarote, además, ha destacado en este sentido que nunca fue juzgado por ningún delito a pesar de ser detenido en las fiestas de la Candelaria y acusado de posible tráfico de drogas.
Posibles pactos y el referéndum en Cataluña
Acerca de las actuales negociaciones entre las formaciones políticas para conformar un Gobierno central y sobre la opción de que finalmente salga un pacto entre Podemos y el PSOE, Galindo ha dicho que ve posibilidades y que su partido "siempre tiene la mano tendida". "Pedro Sánchez nos lo está poniendo muy difícil al pactar con PP y Ciudadanos, pero aun así, yo creo que sí puede haber entendimiento o que debería haber entendimiento", ha expresado. "Trabajaremos lo más duro posible y pediremos explicaciones por todo lo que se haga para dar la máxima transparencia", ha advertido.
El nuevo representante de Lanzarote en la Cámara Alta, que tomó el pasado miércoles posesión de su cargo, ha opinado que no habría independencia aunque hubiera un referéndum en Cataluña. "Nosotros no hemos dicho que este tema sea una línea roja, sino que sabemos que lo que este país ha decidido en las urnas es que quiere un país plurinacional, que hay otras sensibilidades, que hay que oírles a todos y que hay que dejarles decidir", ha señalado. A su juicio, "No hay problema por que decidan; yo no creo que los catalanes se vayan a ir del país de ninguna manera y, además, no tienen mayoría: Tienen mayoría parlamentaria pero no en votos", ha explicado. "Yo personalmente creo que sí y ya en los votos no ganaron, solo en el Parlamento en escaños, pues se llevaron el 48 por ciento", ha comentado.
Sobre las sensaciones que vivió el pasado miércoles, durante el acto de toma de posesión de su nuevo cargo, Galindo ha asegurado que estuvo "muy ilusionado y contento por ver a gente normal por esos pasillos, que pudieran hablar en su lengua y jurar el cargo a su manera; gente normal, sin traje ni corbata, que habla normal y que viste normal. Cambiar la Constitución en un país para su gente". El senador ha explicado que "queremos blindar los derechos de la gente, que es lo más importante creemos que hay en estos momentos".
Galindo ha concluido su intervención confirmando que la figura de senador por Lanzarote contará pronto con una oficia "donde pueda ir la gente a hablar conmigo y a traer propuestas" y ha expuesto que "todavía, hasta el 18 de enero, cuando se conformen los grupos parlamentarios, no sabremos los días de asistencia al Senado".
