Las trabajadoras de la Residencia de Mayores de San Roque, en el municipio lanzaroteño de Tinajo, aseguran que llevan tiempo soportando una situación límite y han terminado estallando. Este viernes, a través de Delia Fernández, delegada sindical, han denunciado públicamente en Crónicas Radio-COPE Lanzarote que la carga de trabajo a la que están sometidos es "brutal" y que la empresa adjudicataria del servicio, la multinacional Clece, no está cumpliendo el pliego de condiciones -que entre otras cosas fija en 3 el número de empleadas fijas- acordado en el momento de la licitación de la gestión de esta residencia.
"Lo más grave es que no se cumple con el pliego de condiciones, que actualmente establece que hay 3 plazas fijas pero que no se están cubriendo, algo que ha debilitado aún más al personal, porque llevamos una carga de trabajo que sinceramente no es normal, y ya no sabemos dónde acudir", ha explicado Fernández en declaraciones al programa 'A buena hora'. La representante sindical ha advertido de que las trabajadoras de este centro, que atiende a personas de edad avanzada o con algún tipo de patología que las hace dependientes, sienten que van a "reventar". "Nos sentimos agotadísimas, pero nos consta que estas situaciones se dan en todas las residencias de la Isla", ha advertido, "y que incluso quizás la nuestra sea de las que mejor está".
La delegada sindical, además, ha destacado que estos problemas "se han comunicado a las instituciones competentes", pero ha lamentado que "no vemos que se solucione absolutamente nada". En este sentido, Delia Fernández ha criticado que, a pesar de los numerosos escritos dirigidos "a todos los consejeros de Bienestar Social que han ido pasando" por el Cabildo de Lanzarote, ni esta institución, como adjudicataria de la gestión de la residencia, ni tampoco la propia empresa se hayan pronunciado al respecto, hayan hecho algún tipo de seguimiento sobre sus denuncias o hayan mostrado interés por la situación de estos trabajadores.
El Cabildo y la empresa Clece "guardan silencio"
Fernández ha alegado que "hay varios problemas a tratar y una serie de deficiencias que se han ido comunicando a lo largo del tiempo tanto al Cabildo, a los diferentes consejeros de Bienestar Social que han pasado por ahí, como también a la empresa". "Hemos hecho cantidad de escritos, pero el tema de la dependencia es algo que está bastante olvidado desde hace tiempo y la pandemia lo único que ha hecho ha sido magnificar todo esto y que todo salga a la luz de una forma más patente todavía", ha dicho la representante de los trabajadores. "Nos hemos dado cuenta de la cantidad de deficiencias que tiene el centro, que no tiene infraestructuras, que cuenta solo con cuatro habitaciones adaptadas, lo que significa que no se puede introducir material para trabajar en condiciones, como puede ser una grúa, algo que nos alivia la carga", ha precisado Fernández.
La delegada del personal de este centro de Tinajo ha criticado también la política que practica la empresa adjudicataria con la rotación de los trabajadores. "Tenemos la política de que, una vez que el personal que entra en el centro y ya conoce al dedillo las funciones y cómo se trabaja en él, como no se deja a nadie fijo y les mandan a la calle para volver a contratar a gente nueva o a gente en prácticas y demás, tenemos al final el mismo problema de siempre", ha lamentado. "Actualmente, con todo lo que tenemos encima, además tenemos que estar enseñando al personal nuevo, cuando ya había personal que no había necesidad de parar", ha agregado. "Se pierde un tiempo que habría que dedicar en realidad, desde mi punto de vista, a los usuarios del centro paa dar calidad en el servicio", ha señalado Fernández.
