viernes. 20.06.2025

La leyenda que rodea al navegante genovés centró la sesión inaugural de las Jornadas de debate y estudio sobre Lancelotto Malocello. Desde el discurso de presentación de las autoridades, se habló de la necesidad de conocer nuestro pasado, la oportunidad que brindan estas Jornadas y el alto nivel de sus ponentes para divulgar el saber existente y cimentar futuras investigaciones.

Así, el vicepresidente del Cabildo y anfitrión del evento, Joaquín Caraballo, expresó en su discurso de salutación y bienvenida la importancia y calado de esta cita: “En un día como hoy es muy oportuna aquella pregunta de Goethe en la que se cuestionaba cómo iba a saber hacia dónde vamos sin conocer de dónde venimos. Y en los próximos dos días se va a tratar de dar respuesta en estas Jornadas sobre Lancelotto Malocello. La supuesta llegada hace ahora 700 años del navegante genovés, su asentamiento durante 20 años y la construcción de una fortaleza es uno de los episodios más interesantes de la historia de la isla”.

“Para ello, -prosiguió Caraballo- contamos con algunos de los más reputados expertos en la materia: investigadores, historiadores, arqueólogos, geógrafos, etcétera, tanto de Canarias como de Italia, que expondrán su conocimiento y puntos de vista sobre el papel jugado por Malocello en la historia de la isla a la que al parecer dio nombre y en su conocimiento para la Europa medieval y renacentista”.

Finalizó su intervención el vicepresidente primero del Cabildo agradeciendo al Área de Educación y Cultura, representado por la consejera Emma Cabrera, al Gobierno de Canarias y al comisionado para la promoción del VII centenario de la llegada a Lanzarote del navegante genovés Lancelotto Malocello y presidente de la Asociación de Amigos Italianos de Lanzarote, Alfonso Licata. A continuación, y tras la intervención del investigador y ensayista italiano, Caraballo dio por inauguradas las Jornadas dando paso a la ponencia del catedrático de Arqueología de la Universidad de La Laguna, Antonio Tejera.

Por su parte, la consejera de Cultura también destacó la importancia de la efeméride: “Hoy es un día significativo para la Historia de Lanzarote. Investigadores de Italia y de Canarias coinciden en estas Jornadas para analizar y debatir sobre uno de los episodios más enigmáticos de nuestro pasado: la figura y trascendencia del navegante genovés Lanzarotto Malocello. Posiblemente, el primer europeo en llegar a Canarias”.

Igualmente, tras resaltar la importancia de que su llegada volviera a colocar a Lanzarote y a Canarias en los mapas cartográficos de Europa, Emma Cabrera expresó su “agradecimiento por participar en estas Jornadas a todos y cada uno de los investigadores y docentes que durante estos días en Lanzarote van a compartir con nosotros sus trabajos e investigaciones”.

Las primeras pinceladas

El primero en esbozar la figura del navegante genovés que dio nombre a la isla fue Alfonso Licata, tras presentar los pocos datos conocidos sobre el navegante genovés. Por ejemplo, que llegó a esta isla; una fecha aproximada a 1312; y que desde esa fecha Lanzarote aparece por primera vez en el mapa catográfico de Angelino Dulcert (1339) bajo bandera genovesa. También se sabe que construyó un castillo o fortaleza, cuyos restos arqueológicos están localizados en el entorno del volcán de Guanapay, en Teguise.

Licata trazó en su intervención un mapa imaginario del contexto histórico del navegante genovés. Explicó sobre el conocimiento que había en la antigüedad clásica y romana acerca de Canarias, “Las Afortunadas y de Madeira eran ambos territorios envueltos en la leyenda y el mito, ubicadas en el océano tenebroso que había más allá de las columnas de Hércules (Estrecho de Gibraltar)”.

En este plano de semi realidad permanecieron hasta el tardomedievo italiano e inicio del Renacimiento, siglo IV. En el contexto de la Ruta de la Seda, el auge del comercio y especialmente de dos repúblicas marítimas, Génova y Venecia. Las cruzadas y los viajes a Tierra Santa acrecentaron la demanda de especias y artículos lujosos.

Empiezan a crearse pequeñas colonias comerciales en distintos puntos de la costa mediterránea, fruto siempre de acuerdos. Sin ningún ánimo de conquista o dominio. Esto hace que Génova y Venecia desarrollen su potencial naval y lleguen a contar con potentes flotas. Con estos medios, los genoveses empiezan a expandirse creando colonias también en la costa occidental africana y consulados en el Norte de África, Baleares, Lisboa y Sevilla, que se convierten en relevantes puertos comerciales.

Es en ese entorno de grandes expediciones atlánticas que los hermanos Vivaldi inician una ruta buscando llegar a las indias bordeando África. No regresaron y al parecer, Lancelotto Malocello, fue en su búsqueda y así llegó a esta isla. “Este sí es un hecho fehaciente. También, que lo hizo unos 200 años antes de la llegada de los franco-normandos comandados por Jean de Bethencourt”, afirma Licata.

No descarta Licata que “incluso éstos fueran descendientes, ya que por aquellos tiempos era común la emigración de Génova hacia Francia. Aunque tampoco se sabe mucho de los Malocello. Sólo que eran una estirpe genovesa, dedicados a las finanzas, al comercio y a la banca, así como que tenían propiedades”.

Sí apuntó el ensayista italiano su esperanza de que “con esta Jornadas se siempre la semilla que haga buscar y descubrir más sobre el navegante genovés”, y valoró sobremanera “la oportunidad que esta ocasión supone para volver a unir dos pueblos, el italiano y el canario, a partir de Lancelotto Malocello, su figura y su legado”.

Lanzarote rinde homenaje a su mentor en el 700 aniversario de su llegada
Comentarios