viernes. 06.06.2025
“Una empresa de esta envergadura no puede llevarse solo desde lo público”, señala la consejera canaria al respecto de Inalsa, en la que apuesta por la gestión indirecta manifestando que el embargo preventivo de exmiembros de consejos de administración “no es justo”

Inés Rojas asegura que se siente satisfecha con su trabajo en Inalsa, pero víctima de la anterior gestión

La que fuera candidata a la Presidencia de Coalición Canaria en Lanzarote señala que confía en la justicia porque está convencida de que la situación interna del partido, "dividido en la Isla", no podrá resolverse de forma interna

La consejera de Vivienda, Bienestar Social, Cultura y Deportes del Gobierno de Canarias, la lanzaroteña Inés Rojas, ha asegurado este miércoles en Crónicas Radio que se siente satisfecha por la gestión que realizó cuando gestionó la empresa pública de aguas de Lanzarote, Inalsa, como presidenta del Cabildo y del Consorcio Insular de Aguas. Al mismo tiempo, la representante de Coalición Canaria (CC) ha admitido sentirse “víctima de la mala gestión anterior”.

En declaraciones al programa ‘A buena hora’, Rojas, que es una de las exintegrantes de los consejos de Administración de Inalsa sobre cuyo patrimonio recae en la actualidad un embargo preventivo, ha indicado que “me siento satisfecha de que trabajáramos tanto para mejorar la situación de la empresa Inalsa. Creo que tomamos una serie de medidas que ayudaron y todos recordarán a Mario Pérez trabajando conjuntamente con los trabajadores y con todo el Consejo de Administración para sacarlo adelante. Nos encontramos con aquel famoso laudo y peleamos para no tener que pagarlo”, ha señalado en referencia al laudo arbitral por el que Inalsa todavía debe indemnizar a FCC (Fomento Construcciones y Contratas) con 12 millones de euros por no construir finalmente una planta desaladora en el sur de la Isla.

Del mismo modo, la consejera ha admitido sentirse “hoy víctima de la gestión no buena que se ha hecho históricamente en Inalsa e históricamente en la isla de Lanzarote de alguna forma”.

Apuesta por la gestión indirecta

Por otro lado, cuestionada sobre la actual situación de la empresa pública, inmersa en un proceso de adjudicación de su gestión de forma indirecta a una empresa privada, Inés Rojas ha apostado abiertamente por la externalización del ciclo integral del agua en Lanzarote.

“Una empresa de esta envergadura no puede ser llevada solo desde lo público, porque realmente lo público solo puede llevarnos a situaciones realmente complicadas. Sin embargo, si el control es desde lo público y se gestiona como se pretende hacer ahora, creo que desde luego podemos ganar mucho en tranquilidad en Lanzarote, pues el Cabildo y los ayuntamientos controlarán que lo se pague por el agua sea lo justo”, ha dicho.

La política, "una actividad de riesgo"

Rojas ha valorado también su situación personal como una de las exintegrantes de los dos últimos consejos de administración de Inalsa, circunstancia por la que el juez de lo mercantil decretó el embargo preventivo de los bienes de estos políticos. Cree que es injusta la situación”.

“La política se está convirtiendo en una política de alto riesgo”, ha advertido la consejera. “Cuando la gente hace las cosas mal conscientemente, desde luego debe pagar por ello. Pero cuando trabajamos con seriedad y rigor y de forma vocacional, a veces nos vemos con situaciones como ésta que me parecen absolutamente injustas. A mí lo que me preocupa es mi situación y la hemos denunciado para que se corrija, pues nuestra gestión no tiene nada que ver con la situación actual de Inalsa, que espero vaya por mejores derroteros”, ha expresado.

Coalición Canaria, partida por la mitad

Por otro lado, la que fuera candidata a la Presidencia de Coalición Canaria en Lanzarote en el último Congreso insular celebrado el pasado 1 de diciembre, ha coincidido con el alcalde de Haría, José Torres, en que “Coalición Canaria está ahora mismo dividida en Lanzarote”.

“No cabe duda de que se desarrolló un Congreso en el que yo, como candidata, denuncié irregularidades en el proceso y renuncié a participar en el mismo. Triste y desgraciadamente no se resolvió dentro de los órganos del partido. No se resolvió dentro de casa y a mí y a la gente que nos respalda no nos quedó otra que denunciar estas irregularidades. Hoy hay municipios como Yaiza, Haría y gran parte de Tías y mucha gente de Arrecife, la mitad del partido, están descontentos”. Rojas ha confiado en que los tribunales de justicia den la razón a la plancha que encabezaba en dicho Congreso y a los comités locales que lo impugnaron. “Confío en que podamos reconducir las cosas, pero como sé que no va a ser así, confío en la justicia”, ha concluido.

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