El Grupo Popular ha querido dejar claro en el pleno extraordinario celebrado este sábado que lejos de lo que el presidente se empeña en repetir existían más opciones antes de llegar a la incautación de la planta de Club Lanzarote.
“Lo que no es de recibo es que en pleno siglo XXI existan núcleos con un volumen de población importante que no dispongan de una red pública de suministro de agua potable”, afirma el portavoz de los populares, Angel Vázquez, a través de una nota de prensa enviada a este diario en la que los populares subrayan su posición.
Vázquez manifestó durante la sesión que “toda la problemática jurídica que ha generado la forma en la que se llevó a cabo la incautación, sin autorización judicial, podría haberse evitado si el Presidente del Cabildo hubiese usado la emergencia hídrica, decretada en abril de 2011, para ejecutar una obra de emergencia destinada a prestar el servicio a los 6.000 vecinos afectados por este plan parcial”.
“Nada impedía al Cabildo realizar dicho proyecto y conseguir precisamente que la red pública de agua potable llegara en estos años a los vecinos de Montaña Roja”, recalcó el consejero. “De esta forma, se hubiese evitado todo el proceso judicial, y los vecinos tendrían garantizado el suministro de agua en las mismas condiciones y a los mismos precios que el resto de abonados”.
Lo que sorprende es que esta opción no fuera barajada en ningún momento por Sanginés antes de incautar, sino con posterioridad a la misma.
“El presidente no para de repetir que solo tenía dos opciones en su mano, cuando lo cierto es que si existía otra salida perfectamente viable y que claramente no uso por dejadez y por falta de previsión”, señala el portavoz popular.
“Entre permitir el desabastecimiento e incautar una planta desaladora privada sin autorización judicial, estaba la tercera opción que era hacer esta obra de emergencia y que no hizo”. Para los populares este extremo resulta muy grave ya que, como mismo reconoce y se encargó de datar durante el pleno, los problemas con la planta desaladora de Montaña Roja se arrastraban desde hacía varios años.
