El decano del Colegio de Abogados de Lanzarote, Carlos Viñas, ha asegurado este jueves a Crónicas que respeta pero desaprueba la dimisión registrada este miércoles de siete de los diez vocales del ente colegiado.
En declaraciones a este diario, Viñas ha apuntado que a su entender, "se estaba trabajando bien". El decano del Colegio de Abogados discrepa con los motivos de la "salida masiva" de cargos y ha manifestado que había "cien formas distintas de haber resuelto las diferencias".
Los abogados que han abandonado su cargo como integrantes de la Junta de Gobierno del Colegio de Abogados de Lanzarote han pedido, en vista de que su renuncia afecta a más de la mitad de los miembros de la Junta de Gobierno, que se celebren nuevas elecciones. Viñas ha explicado, al respecto, que tiene previsto reunirse el lunes con el Consejo Rector para hacer llegar una propuesta al Colegio Canario de Abogados acerca de la fecha de las nuevas elecciones para designar a los nuevos vocales que sustituirán a los que han presentado su renuncia.
Los vocales que han dimitido alegan que en dos años ha habido falta de unidad y consenso necesarios para el buen funcionamiento del órgano colegial y acusan precisamente al decano de tomar decisiones sin contar con el resto de integrantes de la Junta. "No quiero ganarme la enemistad de ninguno y para mí seguirán siendo compañeros", ha expuesto el decano, que ha insistido en que "sigue sin entender" los motivos expuestos por los vocales que han cesado en sus cargos.
Entre las personas que han decidido presentar su dimisión de manera irrevocable está la vicedecana, Raquel Socas Vega; el tesorero, Agustín Márquez Cabrera; el bibliotecario-contador, Arielh Guadalupe Páez; la diputada segunda, Nieves Sánchez Ferrer; la diputada cuarta, Leticia Grimón Rodríguez; la diputada quinta, Teresa Borges Martín y la diputada sexta, Magdalena Nieto Fajardo.
Viñas ganó tras empatar a votos con el candidato José Carlos Rojas. Tras la comprobación del resultado, se tuvo que recurrir a la aplicación de lo establecido en el artículo 26 de los Estatutos Colegiales, donde se establece que en un caso como ese se debía proclamar vencedor al abogado que lleve más tiempo en el ejercicio de la profesión.