La consejera de Patrimonio del Cabildo de Lanzarote, Ariagona González, ha querido salir al paso este miércoles en nota de prensa de las “mentiras vertidas” a su juicio por la alcaldesa de Arrecife, Ástrid Pérez, y sus compañeros del Partido Popular (PP) al respecto de la intervención planteada por el Consistorio capitalino en la fuente del Parque Ramírez Cerdá. Días atrás, los representantes de la Corporación capitalina habían acusado a sus antiguos socios de gobierno de haber bloqueado algo tan simple como arreglar una fuente, fuente diseñada en su momento por César Manrique que lleva paralizada como otras tantas en la capital. Sin ir más lejos, la cascada del Charco de San Ginés que se anunció que se iba a poner en marcha y finalmente no se hizo nada.
“No podemos permitir que sus errores, intencionados o no, su inacción, desconocimiento del procedimiento, falta de predisposición y dejadez puedan poner en duda el buen hacer del Cabildo de Lanzarote y el trabajo de los técnicos de esta institución”, explica la responsable del departamento que dice Arrecife que está bloqueando el proyecto.
“El Cabildo ha insistido en la necesidad de acometer una rehabilitación integral de ese espacio porque es una unidad artística y urbanística y, por tanto, requiere de un proyecto único redactado con criterios homogéneos y no de los parches, ocurrencias y apaños que ha propuesto el Consistorio desde 2019”, insiste González.
“Tras muchos encuentros”, relata la consejera en su nota, “antes del inicio de la pandemia se alcanzó un acuerdo entre las partes para la rehabilitación integral del Parque con un proyecto que se iría ejecutando en función de la disponibilidad de financiación. “Por eso no podemos entender esta polémica en torno a la fuente cuando el ayuntamiento, incluso, llegó a contratar a un arquitecto especializado en la obra de Manrique para redactar un proyecto que, nos consta, ya está finalizado”, aclara.
Ariagona González apunta además que “instalar una bomba de agua y un impermeabilizante en la fuente sirve a la alcaldesa y los concejales para salir en la foto, pero no es más que un remiendo que no soluciona el grave estado de deterioro que presenta uno de los espacios públicos más emblemáticos y visitados de la ciudad por cuanto conserva una parte notable del ideario estético de César Manrique”.
“Lo único cierto es que faltan sistemáticamente a la verdad, igual que faltaron a la verdad en el caso de las pintadas vandálicas del Puente de las Bolas, cuando pretendieron responsabilizar al Servicio de Patrimonio del Cabildo de un asunto que obedecía, únicamente, a la falta de entendimiento y acuerdo entre el Ayuntamiento de Arrecife y una de sus empresas prestatarias de servicios”, resalta visiblemente molesta.
