El casco urbano de la Villa de Teguise se ha convertido durante los últimos meses en el escenario elegido por cientos de lanzaroteños para pasar entre locales de ocio y amigos la noche de los domingos. Ante este panorama, el Ayuntamiento de Teguise explica que el incremento de personas que responden a esta cita ha provocado algunos problemas de vecindad, ruidos y salud pública que el consistorio se ha visto obligado a atajar.
Este realidad es referida por las palabras de Lourdes Cabrera, concejala de Actividades Clasificadas del consistorio. “El pasado domingo tuvimos que aplicar mano dura en este asunto y la Policía Local realizó una tarea de control en las calles que provocó que cinco personas fueran sancionadas por incumplir la ordenanza de actividades, bebiendo en plena vía pública”, afirma.
La campaña que protagoniza Actividades Clasificadas, en colaboración con la Policía Local de Teguise, Área gestionada por Miguel Ángel Jiménez, busca erradicar cualquier problema de convivencia y salud pública: “No podemos consentir que los vecinos se vean perjudicados severamente en su descanso por el derecho de otros a pasarlos bien. (…) Además, la suciedad que se genera durante las noches hace infructuosa la limpieza que hacemos tras el mercadillo de la mañana”, confirma Lourdes Cabrera. Hay que recordar que el Ayuntamiento invierte 50.000 euros anuales en la limpieza del mercadillo villero.
Lourdes Cabrera apunta también hacia la tarea preventiva de la Policía Local en materia de Tráfico: “Hemos y seguiremos multiplicando intervenciones en el casco urbano a través de controles de alcoholemia y tráfico, para evitar problemas mayores entre los jóvenes que nos visitan”, concluye.
Como último dato descriptivo podemos señalar, por ejemplo, que el pasado domingo se llegaron a concentrar unas 400 personas en el exterior de uno de estos céntricos locales de la Villa.
