Antonio Bonilla, representante del Comité de Empresa de los Centros de Arte, Cultura y Turismo (CACT´s) del Cabildo insular de Lanzarote, ha asegurado este martes que el responsable de la Policía Nacional que se personó este lunes en la Primera Corporación insular para evitar altercados entre los trabajadores y los miembros del Consejo de Administración de los Centros llegó incluso a felicitar a los representantes de los trabajadores por su actitud.
“Supongo que la Policía Local no acudió porque la situación no era como se ha querido vender, que somos conflictivos y bélicos”, dijo Bonilla en Crónicas Radio. “Es más, al representante de la Policía Nacional se le explicó por qué estábamos allí, y nos pidió que cuando salieran los consejeros no les agrediéramos. Somos personas civilizadas y no tenemos ni ganas ni motivos para agredir a nadie. Antes de marcharse, este señor incluso nos felicitó a todos los trabajadores, porque nos habíamos comportado como caballeros. Con eso ya nos vale para tener la conciencia tranquila. Lo único que hicimos fue hacerles un pasillo y llamarles culpables”, sostuvo.
La versión ofrecida por el director gerente de los Centros Turísticos, Pedro Fraile, difiere bastante de la ofrecida por los trabajadores. Según el gerente, los representantes de los empleados zarandearon los coches, tiraron huevos, insultaron e incluso amenazaron a los consejeros.
“No digo que eso sea falso”, dijo Bonilla, “pero lo de aporrear la puerta del Cabildo fue una excusa para poder llamar a la Policía Nacional, pues nadie la golpeó. En todo momento estuvimos atentos, pero desde las cuatro hasta las diez y media, el ambiente estaba caldeado. Los consejeros echaban sus miraditas por las ventanas y los trabajadores se lo tomaron también como una agresión. Igual no era esa su intención ni tampoco justifico con eso la actitud de algún trabajador. De todas formas, si se sienten agredidos, pueden denunciar, pues allí estuvo la Policía Nacional y fue testigo”.
Bonilla pidió disculpas por lo ocurrido, aunque aseguró que en ningún momento se agredió a nadie. “Varios ciudadanos se quedaron en el lugar tras escuchar lo que sucedía, y no sé si lo de los huevos vino por ahí”, explicó. “La Policía nos felicitó. Entiendo que a veces el nerviosismo te haga ver cosas que no son, aunque es cierto que vi un huevo volando, pero no fue con predeterminación ni con ánimo de ofender a nadie”, indicó.
Un plan hecho "para escapar la guiñada"
“Lo más importante”, a su juicio, “es lo que se aprobó. Pensábamos que se iba solo a informar del Plan de Viabilidad, pero no a aprobar. De la exposición se pasó a la votación y los trabajadores protestamos, ya que hay ciertos aspectos con los que no estamos de acuerdo. Fue una votación precipitada, sin tiempo, y muchos aspectos se quedaron sin explicar”.
Los trabajadores consideran que el Plan de Viabilidad está hecho “para escapar la guiñada, y no para salvar a la empresa, pues no se refleja nada sobre los recortes a los altos directivos ni sobre el Plan de Austeridad que los trabajadores presentamos hace meses a la consejera”.
En el Plan de Viabilidad “solo se habla de recortes a los trabajadores, de hasta 18 despidos, 9 en los Jameos del Agua y otros 9 en el Castillo San José. Se habla incluso de una prueba piloto para poder externalizar los servicios de hotelería en los Centros Turísticos, y no ha habido tiempo suficiente para trasladarles a los trabajadores qué establece ese Plan de Viabilidad y cuál es la actitud de la empresa y cuál la de los trabajadores. El Consejo de Administración extraordinario no fue convocado ni en tiempo ni en forma”, concluyó.
