- “Creo que va a ser importantísima la unión nacionalista en Canarias, pero no puede cerrarse a cualquier precio. Es es absolutamente falso que Paulino Rivero esté cuestionado en Tenerife”
Francisco Linares, que en Coalición Canaria representa esa parcela de poder que desde la sombra manda, y mucho, ha roto una lanza por la estabilidad del Gobierno de Canarias. El vicepresidente de los nacionalistas en la isla de Tenerife y primer teniente de alcalde en el Ayuntamiento de La Orotava se resigna en Crónicas Radio a contemplar que la llegada del PP a Madrid, con Soria como ministro, pueda provocar cambios en el Ejecutivo de CC y PSC que vuelve a presidir Paulino Rivero. Linares desmiente los rumores que apuntan al descrédito de Rivero y asegura que el próximo Congreso de CC en su ámbito nacional, previsto para la primavera, será fundamental para la autocrítica y la renovación.
- ¿Exageran sus compañeros de Lanzarote cuando dicen que usted es el que más manda en Coalición Canaria?
Yo creo que si. Eso es fruto del cariño, pero muchas gracias.
- Queríamos preguntarle por la situación de Coalición Canaria. Ha habido una reflexión tras las elecciones generales. ¿En qué punto están ustedes en Tenerife?
- Pues sí, efectivamente tras las elecciones nos hemos dado una tregua para la reflexión. Siempre hay momentos buenos y momentos malos. La gente quería cambio y estimaba que eso lo representaba el PP. Nosotros en Coalición Canaria lo hemos tenido difícil también por la crisis. Tenemos un Congreso entre abril y mayo. No debemos hacer una tragedia de esto aunque sí ser autocríticas. Somos conscientes de que formamos parte de una fuerza nacionalista joven, con solo 28 años de historia. Analizamos los errores y es tiempo de renovar el mensaje que debemos transmitir, aunque seguimos pensando que, aun con el empuje de la gente joven que viene detrás y que va a tener tanto protagonismo, nuestro modelo del nacionalismo es el adecuado.
- Ese mensaje con gente nueva sí triunfó aquí, en las últimas locales, en islas como Lanzarote.
- Sí, además hay que tener en cuenta que en seis meses, de mayo a noviembre, no ha pasado nada extraordinario para que los resultados nos variaran tanto de las locales a las generales. Creo que fue algo sintomático que tiene que ver con una coyuntura de carácter puntual. Entiendo perfectamente que la gente esté con ansiedad, esperando a que alguien le diera de beber zumo u oxígeno nuevo. La situación real es esa, el PP vendió excesivamente humo y ahora va a ser totalmente imposible hacerle frente a esas pautas porque nadie tiene varitas mágicas. Nosotros no vamos a ir contra nadie, vamos a hacer lo de siempre; cuando hemos tenido varapalos, hemos hecho autocrítica, pero desde luego hay un espíritu nuevo, con gente como Antonio Morales o Suso Machín en Lanzarote, que representan el modelo de Coalición Canaria de siempre, de arriba abajo, implicándonos con la gente, con los barrios. Creo que tenemos que volver a engancharnos otra vez a la gente. Desde luego abriremos un debate interno para escuchar lógicamente a esas bases, que seguro nos tienen que aportar muchas cosas nuevas.
- Y en el debate sobre el nacionalismo canario, ¿la unidad es posible en Canarias?
- Eso es posible pero el análisis debe ser frío y respetando unas normas. Hay que hacerlo desde una generosidad absoluta. Soy defensor a ultranza de esta idea, pero creo que la unidad del nacionalismo canario no se puede hacer a cualquier precio. Estamos haciendo nuestros análisis internos porque tenemos dudas de si las alianzas que hemos hecho han sido buenas o no, pero eso será cuando toque hacerlo. Indiscutiblemente, la unión siempre es buena, y en una circunscripción electoral tan pequeña como ésta, aún más porque somos pocos y con poco territorio, y o trabajamos todos juntos o serán otros lo que saquen rentabilidad política plena. Creo que el próximo Congreso va a ser fundamental en Coalición Canaria. Creo que va a ser importantísima esa unión nacionalista en Canarias y yo apostaré por ella desde el sitio donde esté, pero repito, a cualquier precio no.
- ¿Cree que con la victoria del PP en las generales y con Soria como ministro, hay que reestructurar la actual conformación del Gobierno de Canarias, o cree que este Gobierno no hay que tocarlo?
- En absoluto, éste es un Gobierno muy estable, muy sólido, que se va a respetar a ultranza para los cuatro años próximos. Eso no es óbice para que desde Madrid se traten de cerrar el mayor número posible de acuerdos con Canarias. Creo que son dos ámbitos políticos que no deben extrapolarse. Les diría a esas malas lenguas que hablan demasiado que en absoluto se romperá, que este pacto es estable y que si se rompe será por otros. Nuestra formación política va a mantener el pacto que pensamos que es bueno para Canarias, y con el que queremos sacar a esta tierra de la crisis en la que, desgraciadamente, estamos.
- Las cosas no han ido mal para Coalición Canaria en la provincia tinerfeña, pero no tan bien en la de Las Palmas. ¿Qué van a hacer para recuperar ese déficit? ¿Seguirán apostando por avanzar con Nueva Canarias?
- No hay otra. En esa isla hermana hemos subido unos 30.000 votos, aproximadamente, tenemos que seguir sumando. NO digo que el camino sea fácil, pero esas asperezas, si todavía las hay, deben eliminarse sumando y dejando los personalismos atrás. Hay que dejar a un lado el pensamiento de partido y poner a Canarias por encima, para lo que hay que unirse entre todas las fuerzas que tenemos un concepto distinto sobre nuestra tierra.
- Llegan muchos rumores sobre Paulino Rivero. ¿Es cierto que está tan cuestionado en Tenerife como se dice?
Eso es absolutamente falso. Es parte de los mentideros políticos e incluso de algunos medios que, por campañas de descrédito, quieren sacar fuera mensaje como éstos, pero yo le aseguro con rotundidad que eso totalmente falso.