Joel Delgado se convierte en el primer canario en conquistar el Manaslu, una montaña de 8.163 metros
El alpinista conejero Joel Delgado ha coronado este martes finalmente los 8.163 metros del Manaslu. De esta forma, logra convertirse en el primer canario en subir la conocida comúnmente como Montaña de los Espíritus y ser el segundo de la provincia de Las Palmas, en coronar una de las catorce cimas de más de 8.000 metros y el cuarto de toda la historia del alpinismo canario.
Según la información aportada en nota de prensa, un cambio repentino del tiempo adelantó un día la aventura que arrancó el pasado 20 de septiembre con el camino hacía el campamento 1. El primer día se desarrolló en un camino poco técnico y sencillo aunque necesitando el uso de crampones a mitad de trayecto para poder avanzar entre la nieve.
A las 7 de la mañana del domingo 21 se puso de nuevo la expedición en marcha para dirigirse al campamento 2. Esta nueva jornada tuvo una mayor complicación al escalar varias paredes de hielo con los crampones y el yumar, cruzando grietas con escaleras y ascendiendo desde los 5.600 metros hasta los 6.500 donde esperaba el campamento 3. Una nueva subida de 900 metros y alguna que otra pared de hielo más fueron las dificultades a las que tuvo que hacer frente el conejero en la tercera jornada del duro reto. Tras las avalanchas y aludes sufridas en días anteriores cerca del campamento 4 la expedición decidió no parar en este campamento, y comenzar desde el campamento 3 el ataque a la cima del Manaslu.
La subida comenzó por una larga rampa de cuesta ascendiendo hasta los 7.400 metros de altitud donde se encontraba el cuarto campamento. Un nuevo inconveniente surgió, pese a alcanzar la cumbre a las cinco y media de la mañana no fue hasta las diez cuando finalmente se pudo coronar el Manaslu ya que la dificultad de acceso a la cima por la estrechez de la misma sumado a que numerosas expediciones, también conocían de la ventana de buen tiempo, aprovecharon las condiciones optimas del clima para realizar la subida desde el campamento 3 y el campamento 4.
Pese a ya haber superado la barrera de los 8.000 (la zona de la muerte) metros aún quedaba un duro reto, el descenso. Hasta once horas fueron necesarias para descender desde el pico más alto sin oxígeno tras haberse acabado la botella que llevaba Delgado. En total transcurrieron 25 horas ininterrumpidas desde la salida del campamento 3 hasta llegar a la cima y volver a descender al mismo campamento con el característico frío de la altitud del Manaslu durante el ascenso y un duro calor en la bajada, pese a todas las dificultades y a la propia dureza de las condiciones en las que se desarrolla la vida a partir de los 5000 metros de altura y de las horas empleadas de más Delgado califica “de muy gratificante e ilusionante para nuevas metas y retos del futuro con los ochomiles, eso es lo que me deja esta nueva experiencia en la alta montaña y quiero agradecer al equipo de sherpas nepalíes que trabajo mano a mano con todos nosotros durante toda la expedición.”
Ya de regreso al campamento base, el miércoles 24 el deportista conejero tuvo incluso un encuentro inesperado y muy grato, mientras realizó el descenso al campo base, con todo una leyenda del alpinismo, Carlos Soria. “Bajando del campamento 3 al campamento base tuve la suerte de cruzarme con Carlos Soria, una gran referencia del alpinismo de 86 años que está rememorando el 50 aniversario de su primer ascenso al Manaslu y tuvimos un encuentro muy agradable con él y con su equipo en el que hablamos de las diferentes secciones que le faltaban para completar su recorrido hasta el campamento 3”, destacó Delgado.
Los 8.163 metros del Manaslu se unen a los 6.189 metros del Islan Peak (2023) y los 7.129 metros del Himlung Himal (2024), todos ellos en el Himalaya, que ya fueron conquistados previamente por Delgado. El montañero de Lanzarote agradece de nuevo la colaboración de los Centros Turísticos, el Gobierno de Canarias a través del área de Deportes, la Fundación UD Las Palmas, el Volcán de La Corona y Summits Sports Events que ha permitido conseguir este hito histórico para el deporte de alta montaña conejero y canario.