Los grupos parlamentarios de Coalición Canaria (CC) y Partido Popular (PP) rechazaron este jueves la solicitud de creación de la comisión de investigación presentada por el PSC-PSOE sobre el llamado ‘caso Tebeto', después de que los socialistas no aceptasen la propuesta de nacionalistas y ‘populares' de apoyar la iniciativa con la condición de que la diputada socialista Francisca Luengo no sea integrante de ese grupo de trabajo.
Mediante la iniciativa se instaba, textualmente, a la creación de una comisión de investigación “para esclarecer los hechos y actuaciones de las administraciones públicas canarias, personas físicas y jurídicas, así como la determinación de las responsabilidades a que hubiere lugar, en relación con el recurso contencioso administrativo número 848/94, sentencia 586/1998 y del recurso contencioso administrativo número 352/08, sentencia 132/2007, así como todos los expedientes administrativos relacionados de forma directa o indirecta con dichas causas judiciales, todo ello relativo a la concesión de explotación minera a favor de la empresa Canteras Cabo Verde SA, en Montañetas de Tebeto, Fuerteventura”.
El diputado socialista Manuel Fajardo Palarea fue quien defendió la solicitud de creación. “El texto que nosotros presentamos es el que hay que votar y saben perfectamente que querían votar que no a la creación de la comisión. Por eso han puesto una condición de imposible cumplimiento, porque no vamos a permitir que Luengo no esté en la comisión, al igual que en otra comisión estuvo presente el jefe de filas de su partido” (PP), expuso. Fajardo expresó el “desagradable sabor de boca” que le queda por el rechazo de CC y PP a la creación de la comisión, pero adelantó que los socialistas lo seguirán “intentando por otros medios”.
El debate se desarrolló en un clima de manifiesta tensión con repetidas llamadas al orden por el presidente de la Cámara, Antonio Castro, dado que cada intervención de los diputados de los distintos grupos dio lugar a constantes peticiones de uso de la palabra por alusiones. Calificativos como “lamentable”, “intolerable”, “difícil”, “complejo”, “nada ejemplificante” o “grave” fueron utilizados por los propios diputados e incluso por el presidente para describir una discusión que, a pesar de sus más de dos horas de duración, se cerró sin ningún tipo de acuerdo y fue definida por el presidente como “un fuego cruzado de todas partes”.
“Testaferro”, “maestros de la mentira”, “Alí Babá y los cuarenta ladrones”, “cocineros de pasteles putrefactos”, “incompetentes”, “manipulador” o “de dudosa calaña” fueron, por otra parte, los términos con que se dirigieron unos diputados a otros en una sesión en la que Francisca Luengo se convirtió en origen y destino de todas las críticas, así como en la causa por la que la propuesta socialista no salió adelante debido a los 30 votos en contra de CC y PP.
“Defensa del interés público”
El diputado socialista Manuel Fajardo Palarea fue quien defendió la solicitud de creación. En su intervención, consideró el asunto “de interés público” y dijo que la “controversia jurídica” que presenta precisa ser remediado por un fallo favorable de los tribunales, “pues de lo contrario, 92 millones de euros tendrían que ser desembolsados por los canarios”. Así, dijo que con el rechazo de CC y PP “se están perjudicando gravemente los intereses de la Comunidad Autónoma de Canarias”.
Fajardo invitó a CC y PP a “defender el interés público, general, a intentar por todos los medios no satisfacer ni un solo euro a una empresa a la que, sin hacer ninguna cata, le ha tocado la lotería con esta sentencia”. Insistió en que si hay alguna responsabilidad “hay que depurarla sin estigmatizar ni criminalizar a nadie”, pero estas manifestaciones no sirvieron para que los dos grupos que apoyan al Gobierno respaldasen la propuesta.