jueves. 18.09.2025

El emérito Juan Carlos I publicará sus memorias

El próximo 12 de diciembre de 2025, la editorial Planeta tiene previsto lanzar las memorias de Juan Carlos I, el rey emérito de España, tituladas: Reconciliación.

La noticia ha despertado expectación y, al mismo tiempo, suspicacias. ¿Qué contendrán esas páginas? ¿Un repaso sincero de sus aciertos y errores, o más bien un intento de blanquear una trayectoria cargada de claroscuros?

La incógnita es grande. Juan Carlos I podría recordar que, durante décadas, se sintió inviolable, tanto en el plano político como en el personal. Podría contar cómo, mientras sus escoltas eran pagados por el Estado, él dedicaba gran parte de su tiempo a la conquista de mujeres y a cultivar amistades en círculos empresariales y aristocráticos.

Tal vez repase su polémica cacería en Botsuana, donde —según las crónicas— cazó un elefante, un episodio que precipitó su caída en desgracia y simbolizó la desconexión entre la Casa Real y la ciudadanía.

También cabe preguntarse si narrará la famosa donación de 100 millones de dólares del rey de Arabia Saudí, vinculada al contrato del AVE a La Meca y a la venta de petróleo a España. Una operación que fue interpretada por muchos como un soborno diplomático y que dejó marcada para siempre la reputación del emérito.

Por otro lado, es casi seguro que sus memorias incluirán los episodios que aún le sostienen cierta legitimidad histórica: su papel en la transición democrática tras la muerte de Franco, su imagen como garante del orden constitucional durante el golpe del 23-F en 1981, y el relato de cómo facilitó la integración de España en la Unión Europea. Sin embargo, el reto de Juan Carlos será convencer a la opinión pública de que estos méritos compensan los excesos de una vida de privilegios.

Resulta improbable que el libro aborde la cuestión del dinero saudí con la transparencia que la sociedad exige. Tampoco parece que el emérito tenga intención de devolver un solo euro de lo recibido, pese a que —según declaraciones de Bárbara Rey— siempre fue un hombre “tacaño” en lo personal.

Hoy, la Monarquía española atraviesa una crisis de confianza. La figura de Juan Carlos I, antaño venerada, se ha convertido en símbolo de escándalos y excesos, arrastrando consigo la institución. Su hijo Felipe VI ha intentado poner distancia con su padre, renunciando públicamente a su herencia y marcando un nuevo rumbo. No obstante, el daño ya está hecho: el emérito aparece en el imaginario colectivo como el rey que cambió la ejemplaridad por la impunidad.

La publicación de sus memorias promete reabrir viejas heridas y dividir a la opinión pública. Para unos, será el testamento político de quien ayudó a modernizar España; para otros, un relato autoprotector que evita lo esencial: la falta de rendición de cuentas.

Lo único cierto es que, con su libro, Juan Carlos I intentará escribir su propia versión de su historia. La pregunta es si los españoles estarán dispuestos a creerla.

Nota: Coincidiendo casi en fecha con la publicación de las memorias del rey emérito, yo, Bruno Perera, presentaré mi propio libro: El rey que fue destronado por barriles de crudo y un elefante. Una a obra, compuesta por 20 capítulos y 22 viñetas satíricas, recorre la vida del emérito desde su llegada a España cuando tenía solo 10 años hasta su retiro exilio dorado en Arabia Saudí. Una mirada crítica, mordaz y visualmente provocadora que ofrece el contrapunto perfecto a su versión oficial.

El emérito Juan Carlos I publicará sus memorias