viernes. 26.09.2025

Canto de despedida a mi amigo Antonio Corujo

Antonio Corujo

 

Antonio Corujo suena, en la brisa del jable y el mar, su timple y su guitarra nunca se apagan, su voz vuelve a resonar.

Noventa y dos primaveras llevaron su canto fiel, con lapas como castañuelas hizo danzar el ayer.

De Víctor “El Salinero” guardó siempre la canción, y en cada acorde sincero puso vida y corazón.

Antonio Corujo suena, en la brisa del jable y el mar, su timple nunca se apaga, su voz vuelve a resonar.

En romerías y fiestas su timple, guitarra y su voz acompañó, las raíces de esta tierra que con su arte iluminó.

Ya descansa el cantautor, pero en Canarias quedó, la memoria del folclore que en sus manos floreció.

Antonio Corujo en su ida suena como eco en los barrancos y en los volcanes de Lanzarote  desde donde las estrellas escuchan su canto.

Adiós para siempre estimado amigo Antonio. Allá donde llegues en la gran Dimensión Cuántica, espero que el Cosmo-Poder te reciba con los brazos abiertos y te dé un lugar privilegiado para que tu gracia, tu canto y tus poemas perduren eternamente.

Canto de despedida a mi amigo Antonio Corujo