La propietaria de la protectora de animales de Puerto del Rosario desmiente que hubiera maltrato animal
Ni hubo maltrato animal ni éstos estaban sometidos a pésimas condiciones higiénicas y de nutrición. Es la versión de Gabriela Cavalieri, la dueña de la protectora de animales de la capital majorera, que ha quedado imputada por un delito de maltrato animal. Se confiesa amante de los animales y por eso entiende que las denuncias recibidas ante el SEPRONA debían hacer referencia a los anteriores propietarios de estos animales. Asegura que su labor es altruista y que la falta de medios es una constante diaria.
La propietaria de la protectora de animales de Puerto del Rosario, en Fuerteventura, donde intervino el SEPRONA de la Guardia Civil la semana pasada, ha desmentido este lunes en Crónicas Radio-Cope Lanzarote que en las instalaciones se produjera ningún tipo de maltrato animal. Gabriela Cavalieri, que ha quedado imputada a pesar de confesarse amante de los animales, ha desmentido así los datos aportados por el Seprona de la Guardia Civil.
La Patrulla del Seprona (Servicio de Protección de la Naturaleza) de Fuerteventura ha procedido, durante el pasado día 7 de agosto, junto con la Autoridad Judicial correspondiente, la Policía Local de Puerto del Rosario y el veterinario del citado municipio, a realizar una entrada y registro en las instalaciones de una protectora de animales situada en el barrio de Los Estancos, en el referido término municipal de la isla de Fuerteventura. La investigación permitió, según informó el Instituto Armado, la incautación de 85 canes y la imputación de un delito de maltrato animal a la propietaria de la citada protectora. Siempre según la versión de la Guardia Civil, los animales, que se hallaban en condiciones higiénico sanitarias deplorables, han sido reingresados en las instalaciones del Albergue Municipal para Animales de Puerto del Rosario.
Muy por el contrario, Gabriela Cavalieri ha puesto de manifiesto en el programa 'A buena hora' de Crónicas Radio-Cope Lanzarote que "absolutamente nunca ha habido maltrato animal. Yo siempre he defendido a los animales desde la infancia, y por mi parte no existe ningún tipo de maltrato animal. Al contrario, sí que existía por parte de los propietarios que han tenido a estos animales anteriormente".
"Quiero comunicar que todo lo que se está diciendo en mi contra no es cierto. Esta situación es muy dolorosa y lamentable, y definitivamente injusta", ha afirmado.
Calviati afirma que su labor en esta protectora se ha basado en rescatar a animales "que están en situación de desamparo, para darles atención inmediata, cobijo, alimentos y si está a mi alcance, también atención médica e higiénica".
La propietaria de esta protectora incide, además, en la salud mental de estos animales. "La parte anímica y psicológica del animal es mu importante, pues muchos llegan con auténticos traumas, y es un placer ver la transformación, después, tanto de la salud física como psíquica, del animal. Mi misión, mi labor y mi ideología, se basa siempre en encontrarles un hogar a estos animales, sobre todo con cariño y amor. Es una actitud que siempre estoy tratando de transmitirle a los demás", ha declarado.
La propietaria de la protectora majorera ha explicado también que la fotografía de un podenco que adjunta la Guardia Civil en su información sobre esta intervención "muestra a uno de los perros que tuvieron que ser sedados porque, igual que otros, no se dejaban coger. No está muerto, como alguien puede especular", ha dicho.
Gabriela Calviati garantiza que "la información aportada públicamente por la Guardia Civil es falsa. El 95 por ciento de los animales de la protectora estaban en muy buen estado de salud".
De hecho, la propietaria de la protectora no entiende que la Guardia Civil no se llevara consigo las decenas de gatos, entre otros animales, que asegura cuida en estas instalaciones. Ahora los 85 perros intervenidos están siendo realojados con nuevos dueños que puedan asegurar un mejor futuro para estos animales.
Cabe recordar que, según el Seprona, el número total de canes que se hallaban en ese momento en el establecimiento era de 96 ejemplares, 75 canes adultos y 10 cachorros, de los cuales 85 han sido incautados y puestos a disposición de la autoridad municipal competente para su conservación. La Guardia Civil acusa a Calviati de"poseer en su propiedad varios animales domésticos con lesiones y en condiciones que menoscaban gravemente la salud de los mismos", delitos que pueden conllevar penas que van desde los 3 meses a 1 año de prisión, así como una inhabilitación especial de 1 a 3 años para el ejercicio de profesión, oficio o comercio que tenga relación con los animales.
Del resultado de las investigaciones se ha realizado el pertinente atestado policial para el Juzgado de Instrucción competente, de la localidad de Puerto del Rosario, y para la Fiscalía de Medio Ambiente de Las Palmas.