El magistrado del Juzgado Número 3 de Arrecife ha decretado este lunes el ingreso en prisión provisional y comunicada para M.J.G.C., alias 'Blondy', de 31 años y origen dominicano, al que imputa un delito de homicidio por la muerte de un hombre de 35 años y natural de Colombia, que ha aparecido muerto este sábado alrededor de las 8.30 horas de la mañana tras ser víctima de una agresión con arma blanca en la zona de Las Rapaduras, al final de la calle León y Castillo de Arrecife.
El detenido, que ya ha sido trasladado a la prisión de Tahíche tras prestar declaración, ha reconocido los hechos en todo momento ante el juez, mostrando además un profundo arrepentimiento y gran malestar por lo sucedido. De hecho, cabe resaltar que las propias cámaras de seguridad de varios establecimientos contiguos, como una gasolinera, grabaron los hechos enjuiciados, cuyo desenlace será analizado por un jurado. En los próximos días se incoará el proceso judicial para el tribunal de jurado, donde tendrá lugar la declaración de varios testigos como pruebas testifical y una audiencia previa al escrito de la fiscal.
Según fuentes cercanas a la investigación, el presunto agresor se vio implicado en una pelea previamente entre individuos de origen colombiano y otros dominicanos, en el bar La Panadería. Posteriormente, uno de estos ciudadanos colombianos, quien se convertiría a la postre en la víctima mortal, le increpó en otro local, el bar La Barca, de donde, tras perder los estribos y en un momento de arrebato, salió corriendo el acusado para asestarle con arma blanca a la víctima una única puñalada en el tórax que le causó la muerte casi inmediata.
El presunto agresor fue detenido en su domicilio, en Arrecife, donde los agentes lo encontraron tras tomar varias declaraciones de testigos sobre el suceso. El acusado estaba esperando a que llegara la Policía y que lo detuvieran y no opuso resistencia alguna.
Aunque en principio no se decretado el secreto de sumario, la gravedad de los hechos ha hecho que el magistrado enviara de inmediato en prisión provisional al procesado hasta la cárcel de Tahíche. En principio, y según las mismas fuentes, todo apunta a que la defensa del acusado tratará de demostrar que se trató de un homicidio, y no de un asesinato, y a que se apoyará en atenuantes como el consumo de alcohol, extremo que podría demostrar una menor capacidad de imputabilidad para el presunto agresor. También es posible que el abogado defensor alegue legítima defensa incompleta. El procesado se enfrenta a una pena de prisión de entre 10 y 15 años por un delito de homicidio.
