Agentes de la Policía Nacional, en una operación conjunta con la Dirección Adjunta de Vigilancia Aduanera, han desarticulado un grupo organizado asentado en las provincias de Sevilla y Cádiz dedicado al tráfico de estupefacientes. Uno de ellos fue interceptado por los funcionarios cuando estaba a punto de viajar a Canarias en busca de refugio.
Los detenidos, según una nota emitida este viernes por la Policía Nacional, introducían grandes cantidades de hachís mediante embarcaciones de recreo a través de las costas gaditanas y onubenses. El operativo, desarrollado en dos fases, ha culminado con el arresto de ocho personas y la intervención de 1.393 kilos de hachís.
La organización ahora desarticulada había protagonizado dos intentos fallidos de introducir diversas partidas de droga, explica la Policía. El primero de ellos se realizó mediante un yate atracado en Puerto Sherry, en El Puerto de Santa María (Cádiz); y el segundo, mediante una lancha deportiva a través de la localidad gaditana de Chiclana de la Frontera.
Posteriormente, los investigadores tuvieron conocimiento de que, a finales de mayo, el grupo había preparado un nuevo envío, a bordo de una embarcación tipo patera, por algún punto de la costa onubense. Se estableció entonces un dispositivo policial que divisó una lancha en la ría de Punta Umbría (Huelva), con tres personas a bordo, que podría contener en su interior gran cantidad de sustancia estupefaciente.
Así, y con la colaboración del servicio Marítimo de la Guardia Civil de Huelva, se abordó la embarcación, que quedó varada en el fango. Sus tres ocupantes huyeron por los alrededores, pero fueron detenidos instantes después por agentes del Greco de la Policía Nacional. Un día más tarde, otros cuatro responsables de la organización fueron igualmente arrestados.
La investigación ha culminado ahora con la detención de otro individuo, también autor de la mencionada operación de tráfico de drogas, que pretendía huir a Canarias para eludir la acción de la Justicia.
En total, se han practicado cuatro registros domiciliarios en los que, además del hachís, se han intervenido 200 gramos de cocaína, dos turismos de gama alta, una motocicleta, equipos informáticos y electrónicos de alta generación y diversa documentación.
La investigación ha sido desarrollada por miembros del Greco de Cádiz, en colaboración con el mismo grupo investigador del Campo de Gibraltar, adscritos a la Comisaría General de Policía Judicial, junto con la Dirección Adjunta de Vigilancia Aduanera.
