El Consorcio de Seguridad y Emergencias del Cabildo ha aclarado este miércoles que, tal y como se está difundiendo por parte de algunos medios nacionales e internacionales, está llegando humo procedente de los devastadores incendios de Canadá a las islas de Lanzarote y de La Graciosa.
Aunque la cantidad de humo no es necesaria para considerarla extremadamente peligrosa para los ciudadanos, lo cierto es que en una jornada en la que se junta con la calima procedente del continente africano y la masa de aire caliente que está subiendo estos días los termómetros, las autoridades sanitarias piden que se adopten una serie de medidas.
El humo está entrando por la parte norte de Lanzarote y por La Graciosa. Sin embargo, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha decidido no establecer ningún tipo de aviso o alarma porque entienden que no se puede tratar el fenómeno como contaminación atmosférica.
En cualquier caso, desde el Consorcio se explica que las medidas que se han adoptado por la ola de calor son válidas igualmente para el caso de que se determinara que el humo procedente de los incendios de Canadá sí constituye una contaminación atmosférica.
Canadá podría estar viviendo su peor año en lo que respecta a los incendios forestales en lo que se tiene de registro. En este 2023 ya se han quemado casi cuatro millones de hectáreas en el gigante norteamericano. En esta métrica, el peor año de la última década fue 2014, con cerca de 4,5 millones de hectáreas quemadas.
Los incendios llevan varias semanas asolando el país norteamericano. La provincia de Quebec, con más de 150 incendios, es la que se está llevando la peor parte.
Los incendios han causado la evacuación de decenas de miles de personas y cientos de viviendas han sufrido daños. Esta misma semana, el primer ministro, Justin Trudeau, se ha reunido con el presidente estadounidense, Joe Biden, para discutir la situación.
