Denuncian también el abandono en la financiación y la construcción del proyecto para el centro solidario de Cruz Blanca

Los vecinos de Altavista, hartos de la suciedad y los malos olores de un barranco del que "nadie se hace cargo"

Advierten de que, "si en una semana no aparece el dueño del barranco del parque de Altavista, estamos dispuestos a comprar una caja de lejía y otra de zotal para lavarlo"

Los vecinos de Altavista están cansados con el estado que presenta día sí y día también el barranco del parque de este barrio capitalino. Rosario González Perdomo, comerciante de esta zona de Arrecife, asegura no entender por qué ahora ninguna administración quiere hacerse cargo del mantnimiento de este barranco. Los vecinos de Altavista denuncian que la suciedad se acumula a diario en dicho barranco y que encima, ahora que que hay tantos días de calor, los malos olores son algo habitual que tienen que soportar, sin que hasta el momento "nadie se haya interesado ni se haya hecho cargo" de este asunto.

En este sentido, advierten de que, "si en una semana no aparece el dueño del barranco del parque de Altavista, estamos dispuestos a comprar una caja de lejía y otra de zotal para lavarlo".

"En estos días de calor, el mal olor de los orines y las deposiciones que hacen muchas personas en el barranco dejan un olor nauseabundo, imposible de soportar. Durante mucho tiempo hemos denunciado los malos olores del barranco y nadie ha resuelto el problema, agravándose con el tiempo", señala González Perdomo.

El proyecto de la Cruz Blanca

Por otro lado, los propios residentes de este barrio han denunciado también el abandono en que a su entender se encuentran los intentos de las administraciones públicas por lograr la financiación y la construcción del proyecto para el centro solidario de Cruz Blanca, una idea para la que tanto el Gobierno de Canarias como el Cabildo insular de Lanzarote han aportado ciertos recursos económicos, pero que todavía se antojan muy insuficientes para poder edificar y materializar dicho proyecto, que lleva ya varios años esperando por una posible financiación.

"Ahora también nos encontramos dentro las vallas de la obra de la Cruz Blanca con el peligro que existe para los niños pues pueden dañarse o sufrir cortes con ellas. La obra de La Cruz Blanca en cuyo frontis podemos ver un cartel del Gobierno de Canarias, es hoy día un peligro diario para los niños que acuden al parque y también un nuevo lugar para los jóvenes que vienen a probar sus primeras sustancias prohibidas", sostienen.