Este domingo aparecieron en el litoral de Teguise múltiples restos de sebadales, una especie que ha sido incluida en el Catálogo de Especies Amenazadas de Canarias

Las sebas quitan las ganas de baño a los usuarios de Caleta de Caballo

Las sebas han reaparecido este domingo en parte del litoral del municipio lanzaroteño de Teguise, quitando las ganas de darse un baño a más de un usuario habitual del pueblo de Caleta de Caballo.

Tal y como se aprecia en las imágenes facilitadas por un lector de este diario, los múltiples restos de seba, una especie que ha sido incluida en el Catálogo de Especies Amenazadas de Canarias, comenzaron a llegar a principios de l pasado fin de semana a esta parte del litoral de Lanzarote.

Habitualmente, las fuertes borrascas que se producen entre septiembre y mayo y los potentes anticiclones del verano favorecen una acumulación masiva de algas y fanerógamas, llegando a alcanzar hasta las 1.500 toneladas al año en el caso de islas como Gran Canaria.

Al contrario de la creencia popular, si las sebas (Cymodocea) ya no llegaban a las playas de Lanzarote es porque hace años se extinguieron los sebadales de los que provenían.

La Cymodocea procedente de las praderas marinas solo se conserva en algunas playas de la Isla, donde se encuentran los sebadales más importantes que actualmente están en regresión, motivo por el que han sido incluidas en el referido Catálogo de Especies Amenazadas de Canarias.