La séptima edición concentró de nuevo a más de mil participantes en un ambiente divertido y en el que no faltaron las sorpresas

Nuevo éxito de la Running de Costa Teguise

La Avenida Marítima de Playa Bastián se llenó una vez más este viernes de niños, padres y profesores en la séptima edición de la Running CEIP Costa Teguise, formando una gran marea de color blanco de corredores en una prueba familiar que registró una marca espectacular, con más de 1.300 inscritos, más otras tantas personas que acudieron a disfrutar de una actividad que se ha convertido en cita ineludible para toda la comunidad educativa de Costa Teguise.

Una vez más el alcalde del municipio, Oswaldo Betancort, estuvo entre los corredores demostrando la implicación del Ayuntamiento en una actividad que ya forma parte del calendario anual de la localidad turística y residencial que más ha crecido en la Isla en los últimos años.

La dirección del Colegio de Educación Infantil y Primaria de Costa Teguise puso en marcha esta iniciativa deportiva con la colaboración del profesorado y AMPA hace siete años con la intención de fomentar la convivencia y relaciones entre todos los miembros que forman y han formado parte de la comunidad educativa del CEIP Costa Teguise, así como de fomentar hábitos saludables entre la población, según ha destacado posteriormente el Ayuntamiento en nota de prensa.

Una jornada lúdico-deportiva dirigida a todo el alumnado del centro y sus familias, así como a los antiguos alumnos, profesorado y al resto del personal del mismo, cuyo objetivo es la culminación de los proyectos realizados a lo largo del curso donde se trabajan competencias relacionadas con el conocimiento e interacción con el mundo físico y con la de autonomía e iniciativa personal para la mejora en hábitos de vida saludables, proponiendo la realización de ejercicio físico y una dieta equilibrada como base para un desarrollo personal global.

La Avenida Los Cocederos se transformó en la tarde del viernes en escenario de una gran fiesta del deporte en familia, con música, animación y mucha colaboración por parte de profesorado, padres y madres, y empresarios de la localidad que aportaron su grano de arena con los regalos que se sortearon entre los niños.

La jornada terminó también como es habitual con una rifa, en la que hubo numerosos premios, menos el coche que la improvisada presentadora anunció pero que no formaba parte de los regalos. Fue lo de menos, porque la gente participó y seguiría participando aunque no se regale nada. Otro éxito más.