Elisabeth Merino agradece la colaboración de los lanzaroteños para que su hermana no sea expulsada

Noemí, Nominada

Asegura que “sabía que iba a ser nominada aunque no por tantas personas”

La concursante lanzaroteña Noemí Merino podría terminar su aventura en Gran Hermano el próximo jueves tras resultar nominada por Michael y todas las chicas de la casa, excepto Sindia.

Su hermana y defensora en el plató Elisabeth aseguró en el programa Así Son las Cosas de Crónicas Radio de este martes que se esperaba las nominaciones ya que les habían avisado para que estuvieran al tanto de que iban a producirse y que “con el antecedente de la gala anterior y viendo cómo se estaban desarrollando las cosas y cómo hablaban las chicas de ella”, se temía que iba a resultar nominada, aunque no por tanta gente.

Hay que tener en cuenta que la lanzaroteña estuvo en la diana de prácticamente todas sus compañeras. “No me esperaba la nominación de Mary Joy ni la de Michael o Verónica pero tras ver los vídeos me di cuenta de que estaban un poco influenciadas dentro de la casa”, cuenta. Piensa que no han valorado su papel en el concurso ya que “está haciendo sus tareas, se está dejando todo en el prueba, colabora con mucho más de lo que le toca y han decidido nominarla por temas personales y por lo que veo, no me parece justo, aunque sea lícito, porque hay que respetar lo que ellas piensan”.

Guerra de mujeres

“Todas las mujeres excepto Sindia la han nominado y es que las mujeres somos envidiosas entre nosotras y llevamos una guerra que no es normal”, dice y asegura que “no sé si es porque mi hermana es guapa o porque se lleva muy bien con la parte masculina de la casa porque otra razón no veo para la nominación, ya que trabaja, habla con todos y la familia sólo podemos pensar que sea una cuestión de envidias”.

Elisabeth cree que una de las mujeres de la casa la ha nominado porque la ve como una rival fuerte y opina que las demás se han dejado llevar. No puede decir cuál porque el contrato con Telecinco le impide dar demasiados detalles sobre la participación de su hermana en el concurso pero piensa que “hay una mucho más inteligente del resto porque la ve como un rival fuerte para la final”.

Dar pena

Elisabeth cree que es lícito cada comportamiento que se tome en la casa para poder continuar en el programa, aunque entiende que no todo es bueno. “Azucena piensa que por su minusvalía puede crear más expectación y que la gente la va a votar para que siga y quizá es un error, pero cada espectador tiene que valorar las cosas y votar en consecuencia”, asegura.

No quiere entrar en los posibles celos de Ariadna pero sí le entristece el comportamiento de su padre y defensor en los platós cuando tachó a Noemí de “algo que no es”. Dice que “esa lindeza no sé de dónde la ha sacado ni por qué se refirió a mi hermana con ese insulto porque ella ha demostrado que no es así”. Cree que tanto Ariadna como su padre están intentando derribar la imagen de Noemí.

Tratamiento de los medios

En cuanto al tratamiento que los medios de comunicación están dando a su hermana, cree que en general, se están portando bien tanto con Noemí como con el resto de concursantes.

Sabe que es tópico que siempre se diga que Gran Hermano manipula las imágenes y piensa que es normal que saquen las secuencias más jugosas. Las polémicas y las cosas graciosas siempre se explotan. “Han sacado hasta la saciedad las imágenes de mi hermana con Hugo en la piscina y no era algo que fuera para tanto pero es normal que ellos quieran sacarle todo el provecho”, explica y asevera que no ve ningún tipo de manipulación. “Ya sabíamos cómo funcionaba Gran Hermano y que podía pasar pero es algo normal porque uno entra sabiendo como va esto”, comenta.

“Si mi hermana sale el jueves me dará muchísima pena porque creo que está trabajando muchísimo y tiene una conducta ejemplar pero el programa es así”, dice.

Paolo

Elisabeth comentó también en Así Son las Cosas que le dijo a su hermana que si se veía envuelta en algún problema, seguro que era porque estaba implicando en alguna especie de triángulo amoroso. “Es lo que ha pasado” comenta y asegura que sabía que iba a venir una reportera del programa de Ana Rosa Quintana para conocer a Paolo, el novio italiano del que Noemí había hablado en el concurso.

“Lanzarote está abierto a todo el mundo y yo les dije que mi familia iba a hacer todo lo que estuviera en nuestra mano por facilitarles su trabajo porque creo que todos los lanzaroteños siempre damos la bienvenida a todo el mundo de la mejor manera posible”, cuenta y entiende que los periodistas tienen que hacer su trabajo, aunque sin hacer daño.

Explica que “Paolo forma parte de la vida de mi hermana y no pienso que esto le vaya a perjudicar porque no hay nada que esconder ya que es un chico muy noble, su relación con mi hermana fue muy buena hasta el punto de que pasó la Navidad con nosotros porque forma parte de nuestra familia”.

Un euro

Para apoyar a Noemí, la gente tiene que votar al concursante que quiere que salga. Se puede hacer a través del teléfono móvil o de Internet. “Sólo cuesta un euro y creo que mi hermana se lo merece, así que por favor, yo se lo agradecería mucho a todos los que lo hagan”, dice. Asegura que “hay que tener en cuenta que además se está haciendo promoción de Lanzarote, aunque tampoco puedo pedir a nadie nada”.

Lo que no ha recibido de momento es el apoyo institucional. Elisabeth reconoce que ningún miembro de la clase política se ha puesto en contacto con ellos y que sólo el ex alcalde de San Bartolomé, Marcial Martín, les ha comentado que se siente orgulloso del papel que están jugando en el concurso.

Por último, aseguró que la que peor lo está pasando en la familia es ella, aunque como es lógico, a su madre también se le hace duro ver a su hija llorando en el programa y quiere ir este jueves al plató “por si la niña sale”.