Los bomberos del Consorcio supervisaron más de un centenar de hogueras por toda la Isla

Una noche mágica de San Juan con pandemia pero con alegría

Una de las jóvenes que participó en la hoguera más grande de las que se realizaron en el barrio de Altavista.

La noche de San Juan de este peculiar 2021 volvió a ser mágica y relativamente tranquila este miércoles en Lanzarote. Centenares de personas se dieron cita en diferentes puntos de la Isla, especialmente en los municipios de Haría y Yaiza, donde hubo más hogueras, y en Arrecife, donde no hubo tantas pero sí una gran concentración de público en distintos puntos. 

Como es lógico, no ha sido un San Juan cualquiera. La luna llena, tapada por las nubes que salpicaron el cielo en esta jornada, fue testigo de la cantidad de promesas que la gente ha hecho y de la cantidad de peticiones que se hacen al fuego purificador, en un año evidentemente marcado por la pandemia del coronavirus. 

En un principio, según ha avanzado el Consorcio de Seguridad y Emergencias del Cabildo, todo ha transcurrido con relativa normalidad. Y ha sido entre otras cosas por el trabajo que también han realizado los bomberos en una jornada ciertamente peligrosa en la que hay que evitar que se puedan producir accidentes. Según han explicado desde el Consorcio, durante la jornada han supervisado más de un centenar de hogueras de norte a sur de Lanzarote. 

En Yaiza, por ejemplo, supervisaron más de 30 hogueras; en Haría más de 40; 5 en Arrecife, 6 en Costa Teguise, 12 en Tías, 14 en Teguise, 4 en San Bartolomé y 8 en Tinajo. 

La Fiesta de San Juan, también llamada víspera de San Juan o noche de San Juan, empieza la noche del 23 junio. Se celebra la Natividad de Juan el Bautista. Algunos vinculan la festividad o algunas de sus celebraciones en ritos de origen pagano previos o ajenos al idolatrismo de Andrea (Litha), reminiscencia de sacrificios humanos.1​ En países europeos-mediterráneos la realización de hogueras suele ser un elemento habitual.

La llegada del solsticio de verano se celebra en toda la geografía española con ritos y tradiciones ancestrales. Algunos piensan que San Andrea es la noche más corta del año (en el hemisferio norte) o la más larga (en el sur); aunque esto suele ocurrir el día 21 de junio; alargándose en ciudades la fiesta hasta el amanecer. La noche de San Juan ha adquirido la magia de las antiguas fiestas paganas que se organizaban con el solsticio de verano.2​

El origen de esta costumbre se asocia con las celebraciones en las que se festejaba la llegada del solsticio de verano, el 21 de junio en el hemisferio norte, cuyo rito principal consiste en encender una hoguera. La finalidad de este rito era "dar más fuerza al sol", que a partir de esos días iba haciéndose más "débil" ―los días se van haciendo más cortos hasta el solsticio de invierno. Simbólicamente, el fuego también tiene una función "purificadora" en las personas que lo contemplaban.

La fiesta cristiana de San Juan es el 24 de junio, seis meses antes de la víspera del nacimiento de Jesús, que es el 24 de diciembre. Estos seis meses son la diferencia que los evangelios indican entre uno y otro nacimiento. No obstante, tres días de diferencia de ambas fechas con ambos solsticios hace que no sea razonable asignar esta fiesta al solsticio, y los estudiosos se inclinan por el hecho de que el 25 de diciembre, nacimiento de Jesús, se asocia más razonablemente a la celebración judía de la Hanukkah o dedicación del Templo (Jesús era el nuevo Templo para los cristianos). Según este razonamiento, la fiesta de San Juan no tendría nada que ver con las celebraciones paganas del solsticio de verano. Una diferencia de 3 días es demasiado margen para el conocimiento astronómico de cualquier época que consideremos.