Martín Alonso. Dos días en huelga de hambre “irreversible”
Fotos: Dory Hernández
Martín Alonso, el padre de Yeray, el chico discapacitado cuya historia ha sido portada de informativos y periódicos desde que su padre fuera expulsado del último pleno celebrado en el Cabildo, se dispone a llegar hasta las últimas consecuencias para defender un derecho que se le está usurpando a su hijo. Alonso anunció este miércoles por la mañana el inicio de una huelga de hambre “irreversible”. “Voy a solidarizarme con los padecimientos de mi hijo y sentir el sufrimiento que él siente”, dijo este padre desesperado ante la falta de medidas inmediatas por parte de las instituciones responsables de que siga sin entrar en funcionamiento del Centro de Atención a Minusválidos Psíquicos (CAMP).
“Esto no es un berrinche”, explicó Alonso. “Mi hijo está perdiendo la plasticidad porque no tiene un rehabilitador. Es un derecho de Yeray. No tiene un centro dónde se le atienda como es debido, sino que está asistiendo a un centro con dos monitores, que es cómo si estuviera en casa”.
El padre de Yeray considera que ya no tiene “más medios para luchar”. La decisión la tomó después de una entrevista a Joaquín Caravallo emitida por una televisión local este martes, en la que el consejero de Asuntos Sociales del Cabildo volvió a hablar del Gobierno de Canarias como responsable de que el centro continúe cerrado a pesar de que la obra terminó hace ya un año. “Yo no soy jugador de tenis para estar tirando la pelota de un lado a otro”. Así es como se siente escuchando a los políticos Martín Alonso.
“No consentiré que se rían de esta forma de Yeray, de que le quiten un derecho constitucional. Prefiero irme en el empeño, porque si no lo hago por él me arrepentiré el resto de mi vida”. Estas palabras las dijo Alonso llorando en antena de la radio de esta casa.
Treinta horas de huelga
A las treinta horas desde el inicio de la huelga, este semanario volvió a contactar con la familia Alonso. En la mañana de este jueves, el padre de Yeray seguía adelante en su drástica determinación. Según dijo su mujer a Pronósticos, su estado de salud era entonces “bueno”, aunque el hambre ya había dejado en él los primeros síntomas de debilidad.
Pasado más de un día, la familia sigue si recibir respuesta alguna por parte del Cabildo. Ni de la presidenta, que está en Berlín, ni del consejero de Asuntos Sociales, Joaquín Caravallo.
“La mentira de la Ley de Dependencia”
Tras años de lucha, varias operaciones, una incluso con médicos rusos para mejorar la calidad de vida de su hijo, hoy Martín Alonso quiere llegar hasta el final “para no perder todo lo que tanto esfuerzo y sacrificio” ha conseguido la familia. “Le prometí a mi hijo que le ayudaría y no me da la gana perder ahora todo lo que hemos ganado porque esta gente no se pone de acuerdo por una partida de dinero”.
Alonso les recuerda a los socialistas que “fueron ellos lo que aprobaron la Ley de Dependencia”, recogiendo miles de votos. “Ley que no se está aplicando. ¿Dónde están los centros? ¿Dónde están las ayudas? Esa ley es una mentira”.
Servicios Sociales de Arrecife seguirá la huelga de hambre
Emilia Perdomo se acercó este miércoles por la tarde a la casa de Martín Alonso para tratar de convencerle de que abandone la huelga de hambre. La concejala de Servicios Sociales dijo al padre de Yeray que “no es una solución y que su hijo le necesita” en perfectas condiciones de salud.
Hasta el momento es la única política que se ha interesado en serio por la medida tomada por el padre de Yeray. Desde su Área municipal, y con ayuda de la mujer de Martín, muy preocupada por la huelga de su marido, a la que se opone, Perdomo seguirá la evolución del estado de salud del hombre decidido a “sufrir” como sufre su hijo.
Arrecife asume el trabajo del Cabildo
Apenas unos días después de haberse acercado a la casa de Rosa Martín, madre de dos hijos discapacitados, el área de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Arrecife, dirigida por Emilia Perdomo, ha puesto a disposición de ésta y otras familias un pequeño local de ‘respiro familiar' en Argana Alta. Un local que no soluciona la falta de atención especializada a personas como Yeray Villalba o los hijos de Rosa Martín, pero sí ofrece una pequeña ayuda a sus familias, que por unas horas pueden dejar a sus hijos al cargo de dos monitores del Ayuntamiento. Y lo ha hecho Arrecife sin que esta actuación esté dentro de su ámbito de competencias. El centro de Argana “es una solución eventual y transitoria”.
Al parecer, algunas peticiones de Emilia Perdomo a la Consejería de Bienestar Social del Gobierno canario han sido escuchadas por Inés Rojas. Es el caso de un cambio de vivienda para la familia de Rosa Martín, vecina de una casa de protección oficial de Titerroy, y que vive en un segundo piso sin que pueda bajar a sus dos hijos discapacitados por la escalera para sacarlos a la calle.