Artemio Callero no entiende que en unos sitios sí se permita y en otros no. Únicamente perseguían aplaudir la labor que están haciendo todos los colectivos implicados en la lucha contra el coronavirus

La Delegación del Gobierno prohíbe un homenaje que querían hacer los transportistas en Lanzarote

La Delegación del Gobierno en Canarias ha prohibido a los transportistas de Lanzarote realizar un homenaje a los sanitarios, a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado y a todos los trabajadores que desde el primer minuto han estado a la vanguardia en la lucha contra el coronavirus. Sin ningún tipo de explicación, sólo con buenas palabras, el órgano que traza las reglas y las normas como representante del Gobierno central en las Islas ha impedido que los camioneros pudieran realizar una sencilla ruta con la que querían visibilizar su agradecimiento a todas estas personas, entre las que se incluye también a todos los que están dentro de su colectivo y que han cubierto servicios esenciales desde el primer día de confinamiento.

Así lo ha relatado este miércoles el presidente de la Cooperativa de Transportes de Mercancías de Lanzarote, Artemio Callero, durante su intervención en el programa “A buena hora” de Crónicas Radio-COPE Lanzarote. Visiblemente molesto, explicó los pasos que ha tenido que dar en estas semanas con la dificultad añadida que ha supuesto el hecho de que en Lanzarote sigue sin cubrirse la plaza de responsable de la Dirección Insular de la Administración General del Estado y que todo se ha tenido que hacer a través de la Delegado del Gobierno en Canarias. “Tras consultar con la directiva, luego lo elevé a la Cooperativa, planteamos una idea que era muy sencilla, hacer un recorrido con nuestros camiones, tocando el claxon y haciendo llamadas de atención, para hacer un homenaje en principio a toda la gente que está en la sanidad pública y posteriormente sumando a otros colectivos, como la gente que está en los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado y en el propio mundo del transporte. La idea era ir por la Avenida, ir por el hospital Insular, por la Comisaría y de ahí al hospital Doctor José Molina Orosa. Hicimos un escrito y lo tuvimos que gestionar fuera de la Isla porque ahora no hay nadie al frente de la Dirección Insular. Lo queríamos hacer el pasado viernes, pero no ha podido ser para nuestra sorpresa”, apuntó.

Y no se puede hacer no por nada en especial, sino porque así lo ha determinado la Delegación del Gobierno, que se puso en contacto por teléfono con el presidente de los transportistas para anunciarle lo que para él era una mala noticia. “Me llamó la secretaria de la Delegación del Gobierno y me dijo que no podía ser. Me dijo que entendía lo que queríamos hacer y que lo agradecía en la parte que les correspondía a ellos por tener el control de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, y nada más”, señaló visiblemente frustrado. Lo está, como es lógico, porque el homenaje también iba dirigido a la gente que está detrás de un volante, gente que también lo está pasando mal y que ha colaborado como en otros oficios para hacer más llevadera la situación de la lucha contra el coronavirus. “La idea era también que el homenaje fuera para nosotros mismos, porque somos un colectivo que está muy olvidado”, denunció.

Artemio Callero no entiende que se hagan distinciones ante este tipo de cosas en unos territorios y otros, que no haya una idea común. Lo dice porque le consta que a pesar de ser ellos pioneros en este tipo de iniciativas, puesto que pidieron el permiso hace semanas, se enteró de que en otros puntos del país, como es el caso de Ourense, sí se ha dado permiso por parte del Gobierno central. “El sábado en Orense, en Galicia, se realizó una manifestación de camiones exactamente igual que la que nosotros queríamos hacer. ¿Cómo funciona este país, en algunos lugares se puede hacer estas cosas y en otros no, por qué?”, se preguntó el presidente contrariado.