LAS MUJERES DEL ARCHIPIÉLAGO SUPERAN LA MEDIA EN PRÁCTICAS SEXUALES DE RIESGO

Las canarias prefieren la 'marcha atrás'

La frecuencia de uso es una de las razones que más influyen en el momento de elegir un método de anticoncepción

El 21% de las mujeres mayores de 39 años admite practicar el denominado coitus interruptus -conocido popularmente como marcha atrás- como método anticonceptivo, un porcentaje que en el caso de las chicas menores de 20 años desciende a la mitad.

Las canarias son las que más practican conductas de riesgo, ya que el 37% de las encuestadas no usa anticonceptivos o practica la marcha atrás; les siguen las andaluzas (34%) y castellano-manchegas (33%).

Así lo revela el estudio Aceptación de los nuevos métodos anticonceptivos en España, realizado por el Círculo de Estudio en Anticoncepción, con la colaboración de 508 médicos de Atención Primaria y ginecólogos de centros públicos y privados y 9.700 mujeres de entre 18 y 49 años.

La frecuencia de uso es una de las razones que más influyen a la hora de elegir un método anticonceptivo, de tal forma que el anillo mensual lidera la preferencia de las consultadas con un 46% que lo elige frente a la píldora diaria (39%) o el parche semanal (15%).

Las navarras y las gallegas son las que más se decantan por las opciones mensuales o semanales, mientras que las cántabras y asturianas optan en su mayoría por la píldora diaria.

Asimismo, las vascas son las que más utilizan anticonceptivos fiables, por delante de navarras y asturianas.

Por edades, el 63% de las jóvenes elige la píldora diaria y un 26% apuesta por el anillo mensual, mientras que las mujeres de entre 35 y 39 años se decantan mayoritariamente por el anillo frente a la píldora.

Respecto al perfil de las mujeres que en la actualidad usan un método hormonal (píldora, anillo y parches) se caracteriza por trabajar fuera de casa y por tener entre 18 y 29 años de edad, estudios secundarios o título universitario y pareja estable.

Según el estudio, el 75% de las españolas que no utilizan métodos hormonales se decantan por el preservativo en sus relaciones sexuales.