Arturo Ramírez dimite de la presidencia insular de Cruz Roja
Arturo Ramírez confirmó en declaraciones realizadas este jueves al diario Crónicas su dimisión del cargo de presidente de Cruz Roja. Renuncia que se produce como consecuencia más inmediata de la polémica surgida en torno a la enorme deuda que mantienen los ayuntamientos de Tías y Yaiza con la ONG. Una deuda que dejó a los trabajadores de la plantilla sin cobrar su sueldo hasta bien pasados los plazos establecidos por ley. La delicada situación por falta de liquidez de la ONG ha hecho que Ramírez se diera cuenta de que su actividad personal como empresario le imposibilita un eficiente ejercicio en el cargo de presidente de la Cruz Roja. Ramírez reconoció su incompatibilidad para el puesto. “Paso más de seis meses al año fuera de España para atender mis negocios”, indicó.
Ramírez aseguró que la ONG ya está negociando el pago de la deuda acumulada con el Ayuntamiento de Tías. También se han iniciado conversaciones con Yaiza. La próxima semana se dará información a los medios sobre el resultado de las mismas.
El comité de empresa provincial de Cruz Roja responsabiliza a Ramírez de desatender sus funciones de “hacer cumplir los convenios y acuerdos con todas las administraciones públicas”, lo que en última instancia ha llevado al retraso en el pago de las nóminas de los trabajadores. Así lo indicó en declaraciones a este diario el presidente del comité, Juan Antonio Corujo. “Las ocupaciones personales de Arturo Ramírez imposibilitan el control y la gestión de la organización”, dijo.
Corujo señaló que a pesar de los impagos por parte de algunas instituciones, los trabajadores de Lanzarote ya han cobrado las nóminas del mes de diciembre. Ahora “el comité de empresa velará por el cobro en tiempo y forma de las sucesivas nóminas y la prestación de servicios” que dependen de Cruz Roja.