Más de una veintena de colectivos participará el sábado en esta actividad tradicional, organizada por la Concejalía de Cultura

Arrecife alfombra con sal la plaza de Las Palmas en vísperas del Corpus

La Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Arrecife última los preparativos para la confección de alfombras de sal, con las que la capital insular colabora cada años en la tradición del Corpus Christi.

A la espera de que finalice el plazo de presentación de bocetos, más de veinte colectivos y asociaciones han confirmado ya su presencia en la plaza de Las Palmas y calles adyacentes el sábado, para ejecutar sus diseños de mineral coloreado, que se convertirán, un día después, en el tapiz por el que discurrirá la procesión acompañada por la Banda del Círculo de Amigos de la Música de Lanzarote.

Cada una de estas alfombras es fabricada entre unas 20 personas, que trabajan durante la tarde del sábado y la madrugada del domingo con el teñido de la sal, con pigmentos orgánicos y la reproducción del diseño presentado.

El Ayuntamiento de Arrecife explica este jueves que la Concejalía de Cultura proporciona otros materiales como maderas y reglas, pisones, carretillas, palas, etc. También se apoya la tarea de muchas horas de los participantes con bocadillos, refrescos y agua.

Las calles elegidas para el discurrir de la procesión del Corpus Christi son la Plaza de Las Palmas, Ginés de Castro e Inspector Luis Martín así como un tramo de la calle Real. Otras calles adyacentes a la Iglesia de San Ginés, como la calle Academia o la calle Manuel Miranda, son las designadas para depositar la sal marina que utilizarán los alfombristas.

Una vez finalizada la procesión, los servicios municipales de limpieza trabajarán en horas de la tarde del domingo para limpiar y abrir las vías al tráfico rodado en condiciones adecuadas.

La concejala de Cultura, Eva de Anta, agradece su participación a centros educativos, oenegés, murgas de Carnaval, asociaciones de vecinos, entidades públicas y colectivos ciudadanos, que realizan cada año las alfombras de sal, “manteniendo viva una bellísima tradición que conjuga creencias religiosas y participación ciudadana, en una jornada excepcional de colaboración y esfuerzo colectivo”.