Arquitectos de toda España acuden a Lanzarote al I Congreso Internacional de Arquitectura para buscar Las sombras en el desierto
Arrecife acoge desde este lunes y hasta el 28 de julio el I Congreso Internacional de Arquitectura que bajo el lema La sombra en el desierto , intentará abrir el debate sobre el modelo arquitectónico de la Isla en torno a la sombra. Esta actividad es una de las más importantes de las organizadas por la Universidad de Verano de Lanzarote, ya que contará con 42 alumnos de las facultades de arquitectura de Las Palmas, Sevilla, Madrid y Barcelona, de las que también se han seleccionado a los mejores profesores para guiar los talleres.
El programa del congreso está orientado hacia el diálogo y la exploración de los paisajes de Lanzarote para idear nuevas formas arquitectónicas en las que se conjugue tradición e innovación y busquen estructuras que den sombra, pero que a su vez "cree espacios comunes alrededor de la sombra en los que se de pie al encuentro entre los ciudadanos", como señaló la presidenta del Cabildo de Lanzarote, Inés Rojas, en la presentación de las jornadas en el Arrecife Gran Hotel. Al acto también asistieron otras autoridades como la alcaldesa de Arrecife, María Isabel Déniz, y los consejeros de Educación y Cultura del Cabildo, Miguel González, y del Gobierno de Canarias, Isaac Godoy.
Todos coincidieron en la importancia de reunir las conclusiones en un libro-guía en un plazo de tres a cinco años que defina los espacios y aporte nuevas fórmulas para crear diseños habitables en comunidad, ideas que se extraerán de las aportaciones de los profesionales y alumnos de arquitectura que en estos días explorarán los territorios isleños. Manuel Gausa, uno de los directores del proyecto y profesional de la arquitectura, apunta a la "innovación y la diversidad dentro de los valores existentes" como el objetivo principal de las actividades, que estarán orientadas sobre todo hacia el trabajo en relación directa con los elementos, por lo que visitarán todos los rincones de la Isla para adaptar los diseños a la realidad del paisaje y forma de vida de Lanzarote.