Yaiza ultima el desahucio forzoso de la empresa de Rosa de las instalaciones de Kikoland, que volverán a manos del Ayuntamiento

El Ayuntamiento de Yaiza está ultimando el desahucio forzoso de la empresa propiedad de Juan Francisco Rosa que disfruta hace años de una concesión administrativa para utilizar las instalaciones de Kikoland, en Playa Blanca, que volverá a manos públicas.

Así lo ha expuesto este miércoles en los micrófonos de Crónicas Radio-COPE Lanzarote el alcalde de Yaiza, Óscar Noda, que ha precisado que "con el visto bueno del Consejo Consultivo, revisamos esa concesión administrativa, que entendíamos que estaba mal tramitada". El regidor sureño ha destacado en el programa 'A buena hora' que "al intentar resolver esa concesión, tuvimos las reclamaciones judiciales por parte de la parte privada, que llegó hasta el Tribunal Supremo, que no le dio trámite y que siempre nos dio la razón. Ahora, según los juristas y técnicos, lo que nos queda es tramitar un desahucio forzoso, que lleva una serie de expedientes que estamos culminando".

Noda señala que una vez tramitados dichos expedientes, ese desahucio forzoso "después tendrá que ir a Pleno para aprobarse, tras lo que al privado se le dará un tiempo prudencial para que abandone las instalaciones de forma voluntaria. Ahí habrá que ver si sigue habiendo otros tipos de recursos y, en ese caso, se seguirán los trámites adecuados".

El alcalde ha querido destacar que "en ningún caso estamos parados con esta cuestión". "Esperamos que cuando termine todo el proceso desaloje esas instalaciones, que volverán a ser de nuevo propiedad del Ayuntamiento", ha apostillado Noda.

Críticas por el retraso del CEO de Playa Blanca

El alcalde ha tenido también palabras críticas ante la certificación del Gobierno de Canarias del retraso con que se han tramitado las obras del Centro de Educación Obligatoria (CEO) de Playa Blanca, que no estará listo para el nuevo curso escolar 2020-2021.

"Yo no busco culpables, sino soluciones. Nos sentamos en distintas reuniones incluso en el Cabildo con la consejera para abordar este serio problema para Yaiza. El actual colegio de Playa Blanca está masificado, con cerca de 900 niños dando clases en barracones. El Instituto de Yaiza también está saturado, pero a pesar de nuestras reclamaciones, no se ha hecho nada. Si el nuevo CEO de Playa Blanca pudiera comenzar su actividad en el curso 20-21, sí desahogaríamos tanto el colegio de Playa Blanca como el Instituto de Yaiza y no tendríamos que mandar once guaguas todos los días a esa periferia del municipio ni mover a tantos jóvenes por las carreteras", ha explicado Óscar Noda. "Este año terminarán cuatro cursos de Sexto al menos que tendrán que ir al Instituto, pero no hay sitio donde ponerlos. Además, algún barracón sigue igual después de que el último temporal destrozara el techo", ha lamentado.

El Carnaval de Las Breñas

Por otro lado, el primer edil sureño ha dado también respuesta al PP en su última denuncia sobre los cambios introducidos en los carnavales de Las Breñas de este año. El primer edil sureño ha asegurado que desde la Asociación Cultural 'Carcajadas' trasladaron al Ayuntamiento que no propondrían nada para las fiestas de este año.

"Cada año se ha celebrado antes incluso que el carnaval de Playa Blanca. Este año no ha habido esas reuniones ni hemos tenido esas peticiones por parte de esa Asociación. Incluso desde el departamento de Festejos me han comunicado que la Asociación dejó constancia de que este año no iban a hacer nada. Nos gusta escuchar a todas las partes, pero desde luego Festejos tiene que cerrar la programación, esos actos y la previsión de gastos, de manera responsable. En el PP saben que, igual que el Cabildo, en Yaiza no tenemos ahora mismo contrato de luz y sonido, con lo que intentamos cubrir con los contratos menores pertinentes los servicios de luz y sonido para cada acto", ha dicho.

El alcalde ha reconocido que "a día de hoy está todo cerrado y se nos complica poder cubrir con más gastos extras no contemplados en las previsiones". Aún así, ha añadido, "tendré conversaciones con algún miembro de la Asociación, y veremos qué podemos hacer, pero cada año hemos tenido ese contacto dos meses antes". "En ningún momento", ha zanjado, "lo que pretendemos es acabar con ningún tipo de acto".