Un vecino denuncia que el agua de su vivienda de Arrecife es de color negro desde el mes de abril
Según el testimonio de este ciudadano, al notar hace ya varios meses que el agua que recibía en casa tenía un color raro, y que incluso la ropa quedaba muy manchada tras lavarla, decidió cambiar la bomba de su vivienda por si era el hidro el que estaba provocando algún tipo de reacción química. Sin embargo, “ocurría lo mismo con la bomba nueva”.
Tras unas semanas de estancia en Tenerife, Trujillo regresó a Lanzarote y comprobó con sorpresa que el agua de su cocina ya no era de color oscuro, sino que se había vuelto totalmente negra. “Parecía agua de alcantarilla”, explica. Por ello, se dirigió entonces a la empresa Insular de Aguas de Lanzarote S.A., Inalsa, solicitando el día 14 de abril que su personal le visitara sobre las siete de la mañana y comprobara in situ el problema. Sin embargo, hasta el día de hoy lo único que ha obtenido de Inalsa es un “silencio sepulcral”.
Acto seguido, este ciudadano tomó varias muestras del agua de su vivienda, lo llevó a analizar a unos laboratorios y en ellos le aseguraron que el agua de su casa contenía aceite y otros residuos orgánicos. Según cree Trujillo, el problema podría estar causado por la proximidad de la central de Inalsa con las sedes de Unelco y Disa en Arrecife.
El denunciante recuerda que entonces “con una copia de esa certificación, acudí al Cabildo de Lanzarote para pedirle a su presidenta, [Manuela Armas], que solicitara a Inalsa un informe con las consecuencias que provocaba el hecho de que el agua doméstica tuviera esos colores y residuos (...). Pero nada, tras dos solicitudes a la presidenta, también el silencio ha sido total”, lamenta.
Fue entonces cuando otro técnico acudió al domicilio del afectado y, tras 48 horas con los grifos cerrados, tomó una nueva muestra. “Fue sorprendente, porque en este primer análisis aparecía una ausencia total de cloro en el agua, algo impresentable desde el punto de vista de Inalsa, que para eso tiene unos laboratorios que deben controlar la cantidad de cloro que hay que añadirle al agua en proporción a cada metro cúbico”, agrega.
Con su denuncia, Luis Trujillo, que hasta hace pocos años era miembro de Izquierda Unida en Lanzarote, hace un llamamiento al resto de vecinos afectados por este mismo problema, que al parecer son varios en la Isla. “Los problemas de salud que esto acarrea pueden ser muy graves. El problema no está en la bomba, sino en la calidad del agua. El informe del técnico de los laboratorios de Biolab habla de déficit de cloro libre residual, turbidez alta y exceso de color”, subraya.
De momento, la denuncia ha sido tramitada para el análisis del fiscal de Medio Ambiente, que en breve, según le han asegurado a Trujillo, se pondrá manos a la obra.