San Bartolomé embargará las cuentas a fin de año a quienes no cumplan con sus impuestos
El Ayuntamiento de San Bartolomé tiene abierto el periodo voluntario de pago de los impuestos IAE y del IBI, este último el más importante para las arcas municipales porque su tributación representa más de dos millones y medio de euros. Inicialmente el pago voluntario estaba previsto entre el 6 de septiembre y el 6 de noviembre pero el Consistorio lo ha prorrogado hasta el 30 de noviembre, según recordó Javier Betancort, concejal de Hacienda. La ampliación de plazo se viene haciendo con regularidad durante los últimos ejercicios. Los contribuyentes que deseen satisfacer sus tributos por medio de entidades bancarias pueden domiciliar el pago de recibos por medio de dichas instituciones (lo que les supondrá un 5% de bonificación) cumplimentando los impresos obrantes en cualquiera de las dos oficinas Presupuestarias de Atención al Ciudadano tanto en San Bartolomé como en Playa Honda.
Aviso de embargo
El concejal de Hacienda dijo que se trata de incentivar al ciudadano para que cumpla con sus obligaciones y sobre todo para que después no tenga que soportar el desembolso que suponen los recargos por pago fuera de tiempo. Es más, Betancort aseguró que, por tercera vez en su historia, el Ayuntamiento efectuará un embargo masivo de cuentas corrientes a final de año a quienes no paguen sus tributos, ya que la Concejalía de Hacienda considera que no es de recibo que los que no cumplen disfruten de los mismos servicios e infraestructuras que aquellos que sí lo hacen. Betancort citó como muy positivo que a día de hoy casi el 10 por ciento de los ciudadanos de San Bartolomé ha decidido domiciliar sus obligaciones tributarias en las cuentas bancarias.
Cultura financiera
Betancort comentó que así como los ciudadanos están atentos al periodo de vencimiento de la declaración de renta porque saben que si no pagan Hacienda pública cae con todo el rigor y aplica todos los mecanismos posibles para forzar el pago, es su deber cumplir con los impuestos municipales. “Queremos que en San Bartolomé se instale la cultura financiera”. En 2001, seis de cada diez ciudadanos de San Bartolomé pagaron cumplidamente sus impuestos, mientras que en 2005 lo hicieron ocho de cada diez. Es decir, ha disminuido la morosidad, sin embargo, San Bartolomé quiere mejorar esos números con el fin de solidificar sus finanzas así sea con medidas que quizá electoralmente no estén bien vistas.