Foto: Luisa Stinga
Así resumía este lunes José Torres Stinga el desarrollo del acto en el que tomó posesión de su cargo, el pasado sábado. El reelegido primer edil describe este evento como un “acto eminentemente institucional y de cortesía” en el que sólo cabe “felicitarnos y darles suerte” al resto de partidos.
Cierra así cualquier valoración posible sobre los grupos de oposición, con los que empezará a gestionar el municipio partiendo de cero, por lo que prefiere no empezar con mal pie valorando sus intervenciones en este acto.
Para el alcalde, este acto es un momento “bastante emotivo”, “emblemático” y “cargado de emotividad” en el que agradece el apoyo que siempre ha recibido del pueblo con su presencia en el salón de plenos.
“Estuvo a la altura de las circunstancias”, concluyó. Con este buen comienzo se le da salida a una nueva legislatura en la que Torres Stinga vuelve a revalidar su cargo en mayoría, una mayoría con la que espera poder seguir “luchando por el municipio”.
“Trabajar y trabajar”
Este es el único lema que regirá según el alcalde su labor en los próximos cuatro años, en los que agradece la suerte que le desean muchos porque “nuestra suerte es la suerte del municipio”, afirmó.
Por esta razón, Torres Stinga tiene claro que su gobierno se va a mantener firme ante cualquier intento de “achantarnos” y que seguirá adelante “sin problemas”.
Con este talante afronta la nueva legislatura, en la que tiene la confianza de que no influirá en su equipo ni “las críticas permanentes” ni ningún “intento de laminarnos”.