Denuncia una "intensa campaña de descrédito y ataque sobre mi persona"

Marcial Martín desmiente que cobre como Alcalde de San Bartolomé 110.000 euros

Asegura que se ve obligado a salir a la palestra ante "las mentiras y falsedades plasmadas en un panfleto firmado por CC, PP, PNL y PIL"

El alcalde de San Bartolomé, Marcial Martín, ha querido querido desmentir las informaciones aparecidas recientemente en un "panfleto" que atribuye a CC, PP, PNL y PIL en las que asegura que se está llevando a cabo una campaña de descrédito sobre su salario.

En un comunicado remitido a Crónicas asegura que "es absoluta y radicalmente falso que esté cobrando como alcalde de San Bartolomé 110.000 € y que el salario que recibo en la actualidad es de 3.623 € mensuales, lo que supone, incluyendo las pagas extras así como los trienios, una cantidad cercana a los 46.000 € anuales, muy lejos de los 110.000 que de forma infame, torticera y claramente tendenciosa la oposición en conjunto se ha encargado de divulgar".

Quiere destacar también que "el sueldo que recibo como Alcalde es exactamente el mismo que cobro por mi trabajo como funcionario del Cabildo de Lanzarote, una cantidad que responde a prácticamente toda una vida como empleado público, ya que han sido 47 años trabajando al servicio de la primera institución insular, lo que supone en total 15 trienios, que a finales de este año, sumarán uno más".

En el escrito señala que "que el sueldo que recibo se encuentra dentro de las cantidades que perciben el resto de alcaldes de los municipios de la Isla" y recuerda que "dicho salario proviene de mi liberación por el Cabildo, de forma que dicha cantidad no le cuesta un solo céntimo a las arcas del Ayuntamiento de San Bartolomé, por lo que no le supone ninguna carga económica".

Martín quiere denunciar que "la manipulación de las cifras, al incluir como retribución económica las dietas que percibo por mi condición de parlamentario regional, que en ningún momento son ingresos, sino que responden única y exclusivamente a los gastos de transporte, estancia y manutención que inevitablemente conlleva el traslado a Tenerife, unas cantidades que varían en función de los viajes que se tengan que realizar al Parlamento regional y que, como yo, reciben los 59 diputados restantes del Parlamento canario, incluidos, los del PP y CC que también residen en las islas no capitalinas".

Afirma que "se observa la mala fe de los firmantes del panfleto en que ni siquiera se han preocupado en sumar las propias cifras falsas que dan sobre mi salario, ya que si se suman con rigor deberían haber puesto un total de 84.000 euros al año, y no los 110.000 que aducen, lo que me lleva a pensar que lanzaron esa cifra con la misma arbitrariedad que podían haber dicho 180.000 o 240.000 euros, por citar cifras a boleo".

Dice también que "en cuanto a la cantidad percibida por plenos, es posible que a la oposición se le haya olvidado aclarar que es exactamente la misma cantidad que perciben los concejales no liberados por el Ayuntamiento, es decir, la misma que perciben también los concejales de los partidos que firman el panfleto".

Quiere recordar que "el primer ayuntamiento que, en medio de la crisis económica, procedió a la congelación y reducción del sueldo de sus representantes públicos fue precisamente San Bartolomé y en este sentido, en 2008 se congelaron los salarios; en 2009, se redujeron en un 6%, y en 2010 se han vuelto a congelar, lo que supone una reducción en la práctica de un 12%".

Piensa que "toda esta campaña en la que se ha unido la oposición entera no puede sino obedecer a una estrategia conjunta de acoso y derribo frente a los numerosos logros conseguidos por este grupo de gobierno, a través de la inversión en gran cantidad de obras y la mejora de numerosos servicios públicos, avances que han sido posibles gracias a que, pese a quien pese, hemos conseguido dotar a San Bartolomé de la mayor época de estabilidad que se recuerda en los últimos años".

Finalmente quiere apelar al juego limpio en política, pues "no todo vale en lo que debe ser el necesario debate y confrontación de los adversarios políticos en el escenario público democrático, basado en el respeto y la responsabilidad allí donde nos han colocado legítimamente los ciudadanos". Explica que "mentir sobre un tema tan sensible, donde muchos ciudadanos de San Bartolomé lo están pasando realmente mal debido a la crisis económica que atravesamos, es una incorrecta utilización de las armas políticas de la oposición, que confío que los ciudadanos de San Bartolomé sepan castigar oportunamente en las urnas".